SAO PAULO.—A casi una semana del sorteo del Mundial, los preparativos hacia la Copa del Mundo de Brasil sufrieron otro duro golpe con el derrumbe de una sección del estadio Itaquerao, sede del Corinthinas, que albergará el partido inaugural del torneo, un accidente en el que murieron al menos dos obreros.
El derrumbe ocurrió cuando una grúa chocó con una estructura metálica de unas 500 toneladas, que a su vez derribó una parte del muro exterior, destruyó filas de asientos y afectó un enorme panel de LED que recorre la fachada del edificio.
El accidente podría retrasar la entrega del estadio, que estaba casi listo antes del derrumbe. La FIFA pidió que las 12 sedes del Mundial sean entregadas a fin de año.
El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, dijo que está “muy triste por la trágica muerte de obreros” en el estadio. “Nuestras condolencias van para sus familias”, indicó.
El secretario general, Jerome Valcke, se expresó “muy sorprendido por las noticias desde Sao Paulo”.
“Ahora mismo no quiero saber de la FIFA, estamos preocupados por las familias de las víctimas”, dijo Andrés Sánchez, ex presidente del club Corinthians, dueño del estadio. El dirigente confirmó la muerte de dos personas, y dijo que no hay más heridos, por el momento.
Uno de los obreros, Fabio Luis Pereira, de 42 años, estaba dentro de un camión que fue golpeado por la estructura metálica. El otro, Ronaldo Oliveira dos Santos, de 44 años, descansaba en un área que se suponía estuviese desocupada.
El accidente ocurrió a la hora del almuerzo, así que muchos de los casi mil 700 empleados que trabajan en la obra no estaban cuando la grúa cayó.
El director ejecutivo del Comité Organizador de la Copa del Mundo, Ricardo Trade, dijo que el Itaquerao no corre el riesgo de no acoger el partido inaugural del Mundial.
“No tiene nada que ver una cosa con otra. Es imposible hacer predicciones en este punto. No podemos pensar que con el retraso de tres meses, el estadio estará fuera de la Copa del Mundo”, expresó.
En tanto que el arquitecto en jefe de la obra, Aníbal Coutinho, afirmó que dependerá del peritaje que se realice al recinto deportivo, para saber si éste puede albergar la inauguración del Mundial.
En declaraciones divulgadas por el portal Folha, el profesional a cargo del proyecto dijo que “aún no es posible determinar el atraso [en las obras] que el accidente va a generar, así que dependerá de los peritajes, para saber si se estará listo para el arranque [del Mundial]”.
Las obras del Arena Corinthians estaban avanzadas en 93% a fines de octubre y deben ser finalizadas el 31 de diciembre, fecha máxima fijada por la FIFA para todos los estadios de la Copa del Mundo.
El estadio en Sao Paulo, que costará 360 millones de dólares, tendrá capacidad para 70 mil personas y tiene previsto albergar el partido inaugural del Mundial, el 12 de junio. Unos 20 mil asientos serán instalados de forma temporal.
Sao Paulo será sede de otros cinco partidos, incluyendo una semifinal. El estadio originalmente iba a ser una de las sedes de la Copa Confederaciones que se disputó en junio pasado, pero los retrasos con el financiamiento de la obra obligaron a las autoridades a descartarlo.
Las autoridades en Brasil trabajan contra el reloj para tener listos los seis últimos estadios mundialistas antes de fin de año, aunque las obras en el Itaquerao estaban bastante adelantadas, comparadas con las de otras sedes.