ABU DABI.— Novak Djokovic y David Ferrer se enfrentarán en la final del torneo de exhibición de Abu Dabi, luego de despachar en semifinales a Jo-Wilfried Tsonga y Rafael Nadal, respectivamente.
Nole jugará su tercera final consecutiva del torneo luego de vencer 7-6 (5) , 6-3 al francés Tsonga. Su oponente será el mismo que el año pasado, tras la victoria de Ferrer 6-4, 6-4 sobre Nadal.
Djokovic tuvo en las gradas a su nuevo entrenador, el alemán ex tenista Boris Becker.
El serbio, segundo lugar del mundo, sigue los pasos de Andy Murray, quien contrató a Ivan Lendl como entrenador en 2011 antes de ganar el Abierto de Estados Unidos de 2012 y Wimbledon de 2013.
Becker, quien renunció a su trabajo como comentarista, trabajará con el equipo actual del serbio, que incluye a Marian Vajda, Miljan Amanovic y Gebhard Phil-Gritsch.
El entrenador de 46 años, ganó seis grand slams y 63 títulos de la ATP en una carrera ilustre en la que se convirtió en el campeón más joven de Wimbledon a los 17 años.
En otro partido en Abu Dabi, el británico Andy Murray, número cuatro del mundo y quien regresó a las canchas luego de una operación en la espalda, ganó su primer partido al superar 6-3, 6-4 al suizo Stanislas Wawrinka en el duelo por el quinto lugar.
“Me sentí muy bien, mucho mejor que hace unos meses. Sólo tengo que jugar más partidos como estos porque la intensidad es mucho más alta que en una práctica”, dijo.
Nadal, por un 2014 de éxitos
Mientras se prepara para el inicio de la gira de 2014, Rafael Nadal asegura estar sano y ser capaz de competir al más alto nivel.
“Lo que yo quiero es poder llegar competitivo y bien a jugar los grandes torneos. Lo que a mí me importa es poder mantenerme en un estado sano que me permita poder jugar la temporada entera, y compitiendo a buen nivel”, dijo.
Los 10 títulos de Nadal la pasada temporada se acercaron a su mejor registro en 2005, cuando ganó 11.
“Por resultados, no sé si 2013 ha sido el mejor año de mi carrera. Lo hace especial la emoción de haber podido ser capaz de competir otra vez al nivel que lo hice. Pero sí, ha sido uno de los más emocionantes de mi carrera. Creo que empecé a jugar más fresco que nunca”.
