RÍO DE JANEIRO.— Brasil utilizará aviones no tripulados para vigilar el espacio aéreo de Brasilia y Río de Janeiro en la ceremonia de apertura y la final de la Copa Confederaciones, que se disputará del 15 al 30 de junio en seis ciudades del país sudamericano.
“Usaremos los drones para monitorear los estadios con seguridad y sin interferir en el tráfico aéreo, que sufrirá restricciones durante los partidos”, afirmó al portal G1, el brigadier Mario Jordao, director del Centro de Operaciones Aéreas de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB).
Brasil posee actualmente cuatro drones de fabricación israelí, dos de los cuales serán utilizados en el sistema de seguridad de la Copa Confederaciones de este año.
Las aeronaves sobrevolarán a una altitud de entre 2 mil y 5 mil metros la región alrededor de los estadios Nacional, de Brasilia, y Maracaná, de Río de Janeiro.
“No habrá ningún riesgo para las personas”, aseveró el coronel Donald Gramkow, a cargo de la operación de los drones.
Según el militar, las aeronaves poseen cámaras y sensores cuyos datos son transmitidos a una base terrestre, lo que permitirá monitorear no sólo los estadios, sino también las regiones vecinas.
Boletos personalizados
Las entradas para los partidos de la Copa Confederaciones, que se celebrará en Brasil del 15 al 30 de junio, estarán personalizadas con el nombre de los compradores, informó el director de Mercadotecnia de la FIFA, Thierry Weil, en una rueda de prensa en Río de Janeiro.
Wiel presentó el diseño de los boletos, que se podrán retirar a partir de mañana en cualquiera de las ciudades sede de la competición: Río de Janeiro, Brasilia, Belo Horizonte, Recife, Fortaleza y Salvador.
Las entradas tendrán varios dispositivos de seguridad, pero solo fueron revelados dos, según medios locales: un chip interno y una marca de agua.
A pesar de que lleven impreso el nombre del dueño, Wiel admitió que era imposible comprobar en la entrada del estadio la totalidad de los billetes, pero que se harían comprobaciones aleatorias.