¿Cómo ganarle a quien admiras tanto? Juan Carlos Osorio no ocultó su idolatría por el sistema futbolístico alemán, su historia y su director técnico, Joachim Löw.
El colombiano lo había dicho antes: “Respeto el proceso alemán, es un ejemplo a seguir”, pero de cara a las semifinales por la Copa Confederaciones, ante los teutones, se desbordó.
“Llaman a este equipo de Alemania, juvenil. Tienen un solo jugador de 20 años, Benjamin Henrichs (compañero Javier Hernández en el Bayer Leverkusen), y dos de 21, la misma edad de Hirving (Lozano)”.
Y especificó porqué de la admiración: “Hay otras naciones que producen jugadores, con diversos procesos a seguir, muy respetables como lo son Argentina o Brasil”.
Pero en Alemania es todo eso y más: “Porque una cosa es ser joven, y otra es ser joven y tener experiencia. Puedes recibirte de cardiólogo a los 30 años, y ya no eres joven, pero cuando sales al profesionalismo no tienes experiencia… En cambio, si un joven que no se ha recibido entrena en urgencias, será un joven con mucha camino recorrido”.
La ventaja que podría decirse tiene el Tri al contar con un equipo más experimentado, se desvanece en las palabras de Osorio. “Los jugadores de 22 a 25 años tienen más 100 juegos en Primera División y eso para los que nos gusta aprender, es muy bueno”.
Ese aprendizaje lo quiere experimentar de inmediato con los jugadores de la Copa Oro; “Edson [Álvarez], César [Montes] y Alejandro [Mayorga] van a ese torneo con la idea de que adquieran experiencia, de seguir ese proceso, como los alemanes”.
La admiración y respeto de Osorio no termina en el sistema alemán, sino también van para Joachim Löw, técnico campeón del mundo, que ha logrado descifrar esquemas y enigmas.
“Más que intrigarme me encanta y apasiona la forma en cómo Joachim Löw le ha hecho modificaciones a una defensa de tres”, para poder conectar, según el análisis, a la gente del centro del campo con el punta.
Hasta que llegó Low: “Alemania con [Julian] Draxler [del París Saint Germain] ha encontrado la forma de lograrlo. Inicia como lateral de la izquierda y en lateral se va al centro para conectar”.
Osorio podía pasarse hablando todo el día de la filosofía alemana, pero era el turno de alguien más de preguntar. Lo que ni duda cabe es que este día en el Olímpico de Sochi, México está a punto de dar un gran paso y Juan Carlos Osorio de vencer a su admirada máquina teutona.
Lo que será un triunfo doble.