Trasladar 300 toneladas de equipamiento de Fórmula uno resulta una tarea titánica para la marca patrocinadora de la Gran Carpa.
No sólo porque los chasises, llantas, piezas y gasolina son material delicado, sino porque además deben hacerlo en el menor número de horas posibles.
“Es todo un reto, debemos usar de siete a ocho aviones jumbo y tratar todo con extremo cuidado. Además son 30 las personas que están dedicadas a todos los trámites que implican las aduanas y los permisos que se tienen que solicitar”, dijo Antonio Arranz, director de DHL Express México.
El empresario explicó que una hora y media después de finalizar cada carrera se comienza a empaquetar para cumplir con los tiempos establecidos.
“La Fórmula Uno nos ha dado toda la confianza desde hace más de 10 años, en parte porque manejamos todo con gran ética y porque compartimos los valores de pasión y velocidad. Es para nosotros muy importante estar involucrados en un evento histórico como lo es el Gran Premio”, dijo Arranz.
