Melbourne.— El Abierto de Australia tendrá una final soñada mañana, luego de que las tenistas Serena Williams y Maria Sharapova, máximas favoritas, ganaran sus respectivos partidos para medirse por el título del primer Grand Slam del año.
La estadounidense Williams, número uno del mundo, tuvo que batallar contra su joven compatriota Madison Keys para ganar por 7-6 y 6-2, y encaminarse a su sexto título en el cemento australiano.
“Me impresionó por su capacidad de permanecer en el partido”, dijo Williams sobre Keys.
Sharapova, quien no ha derrotado a Serena desde 2004, avanzó a su cuarta final en Melbourne Park, con un triunfo por 6-3 y 6-2 sobre su compatriota Ekaterina Makarova.
“Pienso que jugué con solidez” , dijo Sharapova. “Hice todo lo que tenía que hacer. No temí que se convirtiera en un partido físico”, dijo.
Sharapova, campeona del torneo en 2008 y que llegó por última vez a la final de Melbourne Park hace tres años, cayó la última vez que se enfrentó con Williams en Melbourne, pero le restó importancia a esa estadística.
“Creo que mi confianza debería estar alta en una final de un Grand Slam, sin importar a quién me enfrente. Llegué a esa instancia por un motivo. Haré lo posible para obtener el título”, dijo Sharapova.
En la rama varonil, Andy Murray avanzó por cuarta vez a la final en Australia e intentará llevarse un trofeo que le ha sido esquivo hasta ahora.
El escocés, sexto preclasificado, derrotó en una áspera semifinal a Tomas Berdych por 6-7 (6), 6-0, 6-3 y 7-5.
Murray perdió sus tres finales en este escenario: con Roger Federer en 2010 y con Novak Djokovic en 2011 y 2013. El domingo tendrá la oportunidad de poner fin a esa racha contra Djokovic o el campeón vigente Stan Wawrinka. Después de esas derrotas, Murray ha ganado el Abierto de Estados Unidos y Wimbledon.
“Esta semana demostramos que las chicas pueden ser muy buenas entrenadoras también“, dijo Murray sobre su entrenadora, Amelie Mauresmo.
“Mucha gente me criticó por estar trabajando con ella”, dijo Andy.
“Y Madison Keys llegó a semifinales e hizo su mejor torneo; también está entrenada por una mujer, Lindsay Davenport. No veo razón alguna para que esto no siga avanzando en el futuro. Le agradezco a Amelie por esto, fue una decisión valiente de ella, espero poder devolvérselo en unos días. El tenis es así y hay que estar abierto a nuevas oportunidades”, añadió Murray, quien criticó a los medios de su país.
El checo Tomas Berdych comentó: “El juego fue una batalla desde el fondo de la pista, se decidió por detalles, pero no hay excusas. Andy jugó bien durante todo el partido”, dijo.