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"Piojo " intenta revivir al "Ame"

Miguel Herrera quiere llevar a las Águilas otra vez al campeonato para volar después a la Selección

Foto: ARCHIVO. EL UNIVERSAL
30/05/2017 |02:25
Redacción Querétaro
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Tres años y 33 días después, Miguel Herrera vuelve a Coapa.

Este día en las instalaciones del Club América, el Piojo será presentado como nuevo director técnico de las Águilas, en su segunda etapa.

Después de ganar dramáticamente el título para los de Coapa en el Clausura 2013 al Cruz Azul en serie de penaltis, Herrera dejó el equipo para rescatar a la Selección Nacional, que tuvo que ir a la repesca para calificar al Mundial de Brasil 2014.

En la Copa del Mundo llevó al equipo mexicano hasta octavos de final; para después de quedar eliminado en la primera ronda de la Copa América de Chile en 2015 y ganar en ese mismo año la Copa de Oro de la Concacaf.

Ahí comenzaron sus problemas. El día después del triunfo en Estados Unidos, agredió a un comentarista y fue despedido como técnico nacional.

Meses después inició su campaña de regreso al tomar las riendas de los Xolos de Tijuana, a los que los hizo líderes generales en dos torneos consecutivos, pero sin conseguir el título.

La presentación de Herrera vendrá acompañada con la de Santiago Baños, quien dejó la dirección deportiva de las Selecciones Mexicanas para tomar la vicepresidencia deportiva de las Águilas, a los que se unirá Mauricio Culebro como vicepresidente del área operativa, además de Alfredo Tena como director de fuerzas básicas.

Superarse. Miguel Herrera dirigió al América del Clausura 2012 al Apertura 2013, torneos en los que llegó en dos ocasiones a las semifinales y en dos a la final.

Con sólo un título ganado.

Antes de asumir, su cuerpo técnico sufrió una seria baja al perder a Diego Ramírez, su mano derecha, quien tomó las riendas de los Dorados de Sinaloa de la Liga de Ascenso.

A sus 49 años de edad, Herrera quiere resurgir. La vuelta al club que lo encumbró es la mejor manera de comenzar el camino hacia su meta principal, que es regresar a donde fue más popular y más feliz en su etapa como director técnico: la Selección Nacional.

Dicen que las segundas partes nunca han sido buenas, el Piojo ha vuelto a tomar el riesgo.