Parece increíble: el Guadalajara tiene vida, con tan sólo 33% de efectividad en el torneo. Ha estado enfermo de campeonitis durante gran parte del Torneo Apertura 2017, pero el vigente monarca del futbol mexicano, no ha muerto... Todavía.
Al menos, matemáticamente.
Faltan dos jornadas para el final del certamen y el Rebaño Sagrado posee 15 unidades, a seis del último equipo en la zona de clasificación: Cruz Azul [21].
La cosecha rojiblanca le permite pensar en que tiene vida artificial para ingresar a la fiesta donde podría defender su corona.
El problema que enfrentan los dirigidos por Matías Almeyda es que dependen de otros para lograr el pase a los cuartos de final.
Si La Máquina o el Atlas [20 unidades, con tres partidos por disputar] llegan o superan los 22 puntos, el Guadalajara quedará oficialmente eliminado.
Las bondades de un sistema de competencia como el de la Liga MX otorgan esperanza a un Rebaño que suma tres victorias en 15 partidos. Las Chivas se aferran a esa ilusión por más remota e improbable que parezca.