Michael Dörrbecker es uno de los pilotos más completos. En 2005 ganó su primer campeonato como piloto de karts, en 2011 brincó a la categoría de autos tipo fórmula y en 2016 se coronó en la categoría Auto GP Formula Open, serial que forma parte del ACSAI, organizado por la Federación italiana junto con la Fórmula 4 y el campeonato nacional de Gran Turismo de ese país. El año pasado debutó en los autos tipo stock en la NASCAR México, y culmina 2018 como campeón de la categoría Challenge, con lo que sentenció que es un piloto híbrido sin dejar de ser competitivo.
“Es un sueño hecho realidad, fue una tarea muy difícil, teníamos que ganar las últimas tres carreras y ahora poder decir que soy campeón de autos Fórmula, de autos tipo Stock me da mucha satisfacción, me da mucha paz y lo único que espero es que esto me abra muchas puertas y que tenga la posibilidad de seguir demostrando el piloto y la persona que soy, y seguir poniendo el nombre de Querétaro y México en alto”, mencionó el piloto.
En la antepenúltima fecha, Miji se encontraba en la sexta posición del campeonato, necesitaba ganar las últimas tres y que su coequipero y líder de la competencia, Rodrigo Rejón, quedara debajo de la quinta posición. Un reto muy complicado para el piloto, pero que logró superar desde las prácticas y la clasificación donde se llevó la pole position.
“Necesitaba saber, que él [Jimmy Morales, director de escudería Telmex] sabía que yo soy buen piloto y me dijo que era la única manera de hacerlo así, cuando me lo dijo yo creo que ni se lo creía y se la cumplí”, afirmó.
Aguascalientes, Guadalajara y la gran final en el Autódromo Hermanos Rodríguez fueron las carreras donde Miji se coronó y lo que lo llevó a alcanzar los puntos para llevarse su primer campeonato en el serial de autos tipo stock.
“Yo veía lo que necesitaba para ganar el campeonato y me dije, voy a necesitar ayuda de los dioses del automovilismo y me la dieron, me siento como que me dieron el visto bueno y me eligieron a mí para ser campeón”, explicó.
Miji no quita el dedo del renglón, su sueño es correr en la Fórmula 1, pero tiene los pies sobre la tierra, y aunque su calidad al volante jamás ha estado en duda, sabe que su futuro es inicierto para la siguiente temporada. Ya sea para ascender de categoría en la NASCAR o para probar suerte, de nueva cuenta, en circuitos extranjeros.
arq