La conversación sobre el lugar que ocupa Canelo entre los peleadores mexicanos cambió para discutir en qué sitio de la historia del boxeo se encuentra el tapatío.
Saúl Álvarez (53-1-2, 36KO’s),se desplazó a los semipesados por buscar su cuarta corona y lo consiguió al noquear en el undécimo round al ruso Sergey Kovalev (34-4-1,29 KO’s(, para conquistar el cinturón de la Organización Mundial de Boxeo.
La intriga que vendió la pelea era saber cómo Canelo reaccionaría a los golpes de un hombre más pesado, alto y fuerte que él. A lo largo del combate, Saúl Álvarez tuvo que adaptarse y en los rounds de campeonato consiguió un triunfo que le da legitimidad a su carrera.
Por primera ocasión en 80 años, el boxeo tiene en el Canelo a un peleador que posee actualmente tres campeonatos en diferentes pesos. El anterior fue Henry Armstrong.
A muchos aficionados les habría encantado que anoche el Canelo reviviera su rivalidad con Gennady Golovkin, pero se quedaron tranquilo al ver que el tapatío dio una exhibición de gallardía.
Las leyes no escritas del pugilismo indican que los boxeadores pequeños son vencidos por los boxeadores grandes. Álvarez la desafió al derribar a un oponente 10 centímetros mayor que él.
El plan de pelea del mexicano fue esperar el embate de Kovalev en la primera parte de la pelea y a partir del sexto round iniciar su ofensiva. El plan de Eddy Reynoso funcionó y ahora Canelo se encuentra en la cima de su carrera y del boxeo mundial.
Quizá el mayor inconveniente qué pasó el Canelo fue los poco más de 30 minutos que tuvo que esperar por una función de UFC en Nueva York que atrasó el evento principal en Las Vegas.
Saúl Álvarez se une al club de Érik Morales, Juan Manuel Márquez y Jorge Arce como los únicos mexicanos con campeonatos en cuatro diferentes categorías.