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Esaú Magallanes, candidato a diputado federal por el Distrito II por la coalición Por México al Frente, asegura que su amistad con el gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez Servién, no fue un factor determinante para aceptar la candidatura, y agregó que tiene amigos pertenecientes a diversas fuerzas políticas.
El ex presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) externó a EL UNIVERSAL Querétaro que aceptó la candidatura ofrecida por PAN, Movimiento Ciudadano y PRD, no para percibir un salario, sino para bajar recursos y hacer el bien en Querétaro.
¿Por qué adentrarse a la política?
—Siempre se ha quejado uno de todo el entorno económico y lo que pasa en el país. Para entrar hice de lado mi negocio y mis empresas. Tomé la decisión de entrarle para hacerlo con gusto, sé que va a ser difícil cambiar muchas cosas de lo que está mal, pero un granito de arena que cambie para bien de nuestras familias va a ser bueno.
¿Su amistad con el gobernador Francisco Domínguez Servién contribuyó a que aceptara la candidatura?
—La amistad con el gobernador no fue un factor, tengo amigos en el PRI, PRD y PAN, siempre he sido gente de trabajo, ellos se me acercaron y me gustó la idea de ser candidato ciudadano. No estoy afiliado a ningún partido por eso si no me gusta me salgo y sigo con mi ciudadanía intachable.
¿Cree que las acusaciones hechas en contra de Ricardo Anaya Cortés perjudiquen a tu campaña?
—Yo estoy concentrando en mi campaña; además no creo que sea real porque no veo que haya una orden de aprehensión.
¿Considera tener ventaja por ser candidato ciudadano?
—Es una ventaja muy importante, porque aparte de ser ciudadano, conozco las necesidades de nuestra gente, de los comerciantes y empresarios, nunca he vivido del erario, no sé ni cuánto voy a ganar, ni me interesa, porque me va mucho mejor en mis negocios. El tema es ayudar a la gente, lo hago por convicción, no por necesidad.
¿De resultar electo buscaría otro puesto de elección popular antes de concluir el periodo como diputado federal?
—Nunca he sido político, ni creo que lo vaya a ser. Necesito ver cómo es, si me gusta, porque traigo la idea de ayudar a gente y bajar recursos. Si llego y no puedo hacer nada, porque te ves topado con un mundo de corrupción y con muchas paredes, me saldría.
¿Qué le diferencia de sus adversarios?
—Tengo años ayudando dentro de las empresas, hicimos una fundación para saber las necesidades. Cuando eres creador de empleo y conoces el panorama de atraer negocios la visión es diferente.
¿Cuáles son las principales necesidades que le han externado los habitantes de los municipios que pretende representar?
—Las necesidades primarias: drenaje, alumbrado público, calles, escuelas, clínicas y la seguridad. Todo a través de gestionar recursos y entablar comunicación con los 106 delegados que hay en los tres municipios que representaremos para que ellos informen a la ciudadanía en que se está trabajando.
¿Cuál sería su agenda a impulsar en el Congreso?
—La creación de la segunda zona metropolitana, que abarca San Juan del Río, Tequisquiapan y Ezequiel Montes, para llevar desarrollo y empresas que ayudarán a generar empleo, y así evitar que los trabajadores hagan un viaje a Querétaro hasta de tres horas ida y otras tres de regreso.
Otro eje central serán las mujeres, voy a trabajar en la equidad, para que quien atente contra ellas lo piense dos veces, vamos a impulsar leyes incluyentes para que los salarios de hombres y mujeres sean los mismos.
En educación trabajaré para subir el nivel de escolaridad de los trabajadores, esto a través de llevar maestros a las empresas para que los empleados puedan concluir sus estudios.
Hay muchas cosas por hacer, no podré cambiar el sistema que está mal, pero un granito de arena que podamos aportar estará bien.
¿Cuál es su postura en temas polémicos a nivel nacional, como el aborto y la legalización de la marihuana?
—En legalizar el aborto, yo creo en la vida, pero hay pluralidad y por eso tenemos que respetar los derechos de los ciudadanos.
Sobre la legalización de la marihuana, si fuera para temas medicinales y en favor de salvar a alguien pues sí, pero tendría que legislarse bien y poner candados adecuados. Todos hablan de la legalización y nadie de la producción, tendría que ser un debate profundo y real.
¿Cómo vislumbra la jornada electoral del 1 de julio?
—Quiero hacer un llamado a mis contrincantes a no hacer cosas fuera de la ley, dejemos que la ciudadanía decida, no hay que caer en provocaciones. Estamos para esperarlos con gusto y valor porque si hacen algo mal lo vamos declarar. No vamos a permitir que nos revienten casillas, que nos roben votos o que quieran pagar dinero por votos, no lo vamos a permitir.