En 25 años de la creación de la Secretaría de Desarrollo Social, así como de su delegación en Querétaro, el estado ha disminuido considerablemente la cantidad de personas que sufren de pobreza, aseguró el delegado Ernesto Luque Hudson, quien destacó que actualmente sólo se tiene un registro de 500 mil personas en esta condición, aunque reconoció que son cifras que duelen.
Afirmó que de igual manera, los recursos han aumentado año con año, por lo cual se ha podido colocar al estado como la tercera entidad con menor pobreza, inclusive, afirmó que Sedesol tiene presencia en todas las comunidades queretanas.
Pese a los trabajos que se han realizado durante este periodo, aún siguen los indicadores de pobreza; pues 500 mil personas tienen una o dos carencias, mientras que 76 mil tienen tres o más, por lo que se les califica como pobreza extrema. Estas son cifras que duelen, pero que derivado del trabajo coordinado entre los tres órdenes de gobierno se han disminuido, afirmó.
Por ser una dependencia “noble” con el paso del tiempo se ha querido hacer mal uso de la Sedesol; sin embargo, derivado de las nuevas leyes de transparencia, rendición de cuentas y acceso a la información la gente puede tener la certeza de que sus recursos están siendo bien utilizados, dijo.
¿Cómo se refleja en Querétaro, los 25 años que ha tenido presencia la Secretaría de Desarrollo Social?
—Sin duda 25 años se dicen rápido, pero son años de mucho esfuerzo y trabajo. Ha sido un tiempo de mucho trabajo, ha sido una evolución importante, a lo largo de este periodo se debe reconocer que Querétaro se ha convertido en un estado próspero, incluyente con políticas de desarrollo integral, la estrategia nacional de inclusión es el esfuerzo más ambicioso de los tres niveles de gobierno para mejorar las condiciones de vida. Querétaro no tenía comedores comunitarios y ahora en septiembre se tendrá cobertura de 100%, lo que representa que tendrá mejoras en la educación, en la economía familiar y abonamos al componente de la salud porque comerán de manera sana, variada y suficiente, por supuesto también trabajamos por nuestros adultos mayores. Estaremos llegando a 300 o 400 mil beneficiados por año.
¿Económicamente cómo mejoró el apoyo de Sedesol a Querétaro en este cuarto de siglo?
—En 1992 la delegación tenía aproximadamente 700 mil habitantes, de ellos 400 mil tenían algún tipo de pobreza y teníamos un presupuesto de 13 millones de pesos. En 1995, se otorgaron 480 millones de pesos, creció exponencialmente ya para 2017, fueron 2 mil 700 millones de pesos, pero el presupuesto de Prospera fue de mil millones más, es de decir, poco menos de 3 mil 700 millones; también el Fondo de Aportaciones de Infraestructura Social que es de 676 millones, lo que significa que hemos aumentado exponencialmente en recursos. En programas ahorita tenemos ocho o 10, entre 1992 y 1995 teníamos un solo programa que era enfocado a la niñez y de ahí se desprendieron más.
¿Cuáles fueron las tuercas que se tuvieron que apretar desde que entró a la delegación de Sedesol para beneficiar al estado?
—Si bien estamos conscientes de que nunca será suficiente, sabemos que se tiene que hacer más con menos. Seguimos avanzando y debemos reconocer a los otros ocho delegados de Sedesol, que estuvieron antes que yo, que fortalecieron una de las instituciones más fuertes del país. Yo encontré una gran capital humano, solamente había que aplicar las directrices para fortalecer la identidad de la institución y mandar una señal de que tenemos que cambiar las condiciones de vida de los queretanos; además demostrarles a nuestros beneficiarios que debemos fortalecer la calidad y la calidez de los servicios. En los últimos años ha habido una cercanía con la delegación, nosotros todos los días tenemos contacto con la gente, para nosotros esto es importante, no venimos a descubrir el hilo negro, sólo a hacer nuestro trabajo.
Mucho se habló de la Cruzada Nacional Contra el Hambre y aún tenemos sectores vulnerables ¿cuáles son nuestras carencias y cómo se va a trabajar?
—Áreas de oportunidad tenemos muchas, puedo estar conforme con la ruta que se está llevando a cabo desde la implementación de la Cruzada Nacional Contra el Hambre y va más allá todavía, porque este programa iba enfocado a atender la carencia alimentaria: sin embargo, con la Estrategia Nacional de Inclusión vamos a los componentes de salud, alimentación y bienestar. Con esto lo que quiero destacar es que tenemos que redoblar esfuerzos: no solamente tener un comedor en cada municipio. También debemos contar con más lecherías, tenemos que cumplir con el compromiso del secretario Miranda, y contar con más tiendas de Liconsa, ahora tenemos 134 mil y 800 mil beneficiarios. Debemos aprovechar estas instalaciones para poder trabajar más fuertemente en conjunto con la sociedad civil. Querétaro es el tercer estado menos pobre, esto se debe al esfuerzo de los tres órdenes de gobierno, pero tampoco sería posible sin el apoyo de los empresarios, es algo cierto. [El estado] tiene 1.6 millones de derechohabientes, hay dos millones de habitantes, esto es una buena noticia porque garantizamos guarderías, jubilaciones y pensiones, así como los servicios de salud básicos.
Tenemos cerca de 500 mil pobres y 76 mil personas en pobreza extrema, son cifras que nos duelen mucho pero estamos trabajando para mejorar. Hay que destacar que antes teníamos 100 mil en pobreza extrema, hace siete u ocho años teníamos 800 mil pobres, ahora son 500 mil, esa es una realidad pero por supuesto que ha habido una disminución.
¿Todas estas personas reciben algún apoyo de la Sedesol?
—Sin duda, están focalizados en diferentes segmentos, no es lo mismo la atención que le damos a los 76 mil pobres extremos que tienen al menos tres carencias, que a los pobres que tienen máximo dos carencias. Dependiendo del programa es como nos acercamos a la gente, lo que es un hecho es que en diferentes programas tenemos una gran cantidad de beneficiarios, somos una de las delegaciones que tiene más contacto con la gente. Nosotros estamos obligados a tener un acercamiento, pero si la necesidad que tienen ellos se sale de nuestra competencia debemos canalizarlos.