En materia de combate al robo de combustible y ordeña de ductos, en el estado de Querétaro se realizaron en los primeros ocho meses de 2018 un total de 169 operativos, que significa un incremento de 161% frente a lo que se hizo durante los 12 meses de 2017, informó el secretario de Seguridad Ciudadana (SCC), Juan Marcos Granados Torres.
En entrevista con EL UNIVERSAL Querétaro, el funcionario estatal destacó que en Querétaro se ha contenido el problema del huachicoleo, a pesar de la colindancia que se tiene con Guanajuato, Estado de México e Hidalgo, donde el clima de violencia se ha desatado por la actividad permanente que tienen las bandas que se dedican al robo de combustible y ordeña de ductos.
En el país, Granados Torres dijo que hay 22 entidades que presentan problemas de huachicoleo, y Querétaro ocupa el décimo lugar con mayor incidencia en este ilícito, situación que se da principalmente porque en San Juan del Río cruzan tres de los ductos más importantes hay en México.
¿Qué está haciendo la SCC para combatir el huachicoleo, principalmente por la zona dónde atraviesan los ductos?
—El origen del hidrocarburo se da en la zona de Veracruz, en la refinería de Tula, de ahí viene hacia la zona de San Juan del Río, atraviesa el estado en Pedro Escobedo, Corregidora y Querétaro. Estamos rodeados de dos grandes refinerías: la de Salamanca y Tula. Es muy complejo el fenómeno de la toma clandestina, puesto que es un tema que se está combatiendo a nivel nacional, debido a que 22 estados de la República tienen ductos de Pemex, y esos 22 estados tienen problemas similares, aunque de diferente magnitud.
Querétaro no está en las condiciones que tiene en este momento Guanajuato, el Estado de México, Hidalgo, Tlaxcala, Veracruz y Puebla.
El gobernador Francisco Domínguez Servién ha puesto atención a los problemas federales que suceden en Querétaro, y por eso los que integramos el gabinete de seguridad tenemos el compromiso de atender estas problemáticas que tienen que ver con el robo de combustible o la ordeña de ductos.
El gobernador Francisco Domínguez y Pemex se comprometieron a combatir de manera frontal el robo de hidrocarburos, esfuerzo en el que se establecieron compromisos en el que se reconoce que el gobierno de Querétaro no se hace cargo del tema de hidrocarburos, pero sí se compromete a colaborar de manera permanente en una coordinación muy estrecha con las autoridades federales, como son la PGR, la Policía Federal y el Ejército Mexicano.
Por eso, desde 2016 a la fecha, venimos haciendo operativos en los cuales venimos capacitando a los elementos de las policías municipales, para que sepan controlar ductos cuando se detectan fugas. Esto nos permite evitar que se presenten siniestros de mayor magnitud.
El tema de robo de hidrocarburos no solamente genera acciones de violencia entre los grupos que se dedican a esto, sino también están provocando temas de contaminación en las zonas de parcelas en el suelo cuando existe una fuga importante, además del riesgo que representa para la población cuando se presenta una explosión en un ducto.
Además de este trabajo en el que involucramos la participación de Protección Civil, la SSC se encuentra participando en operativos conjuntos con la Sedena, PGR y Policías Municipales.
Durante los 12 meses de 2017 se contabilizaron 149 tomas [clandestinas] detectadas, mientras que en los primeros ocho meses de 2018 el número pasó a 167.
Este incremento en la detección de tomas obedece a que en 2017 se tuvieron 82 operativos, con la participación de todas las corporaciones de seguridad. Mientras que para 2018, tan sólo de enero a agosto, por el incremento que hicimos con presencia policial en la zona de ductos, se hicieron 219 operativos.
En ese periodo se dio un incremento de 161% en materia de operativos, lo que se traduce en mayor trabajo, por ejemplo, en 2017 tuvimos 56 detenidos, con el aseguramiento de 117 vehículos, mientras que en los primeros ocho meses de 2018 se llegó a 169.
Por supuesto que se ha incrementado el número de aseguramientos, es más la cantidad de diésel, gas y gasolina que estamos entregando a la PGR.
Sin duda son más las carpetas iniciadas, el número de detenidos, aseguramiento de vehículos, aseguramiento de combustible. Gracias a que cada día contamos con mejor información, nuestra corporación está en operativos cada vez más dedicados y enfocados en los lugares en donde se está presentando este problema. Todo esto es con el objetivo de colaborar con las autoridades federales para cuidar lo más posible la seguridad de las personas en las comunidades, a fin de reducir los riesgos a los que pueden estar expuestos.
En el transcurso del año se tuvo un par de vehículos incendiados, donde dos personas fallecen, además, en otro incidente, un policía municipal estaba a cargo [del ducto] y se tuvo el fallecimiento de dos personas. Todas estas situaciones que se dan en lugares despoblados, queremos evitar que se presenten estos riesgos.
El problema lo atendemos con una policía honesta, confiable, bien pagada, capacitada y altamente preparada.
¿Cuál es la estrategia que se tiene en la frontera con Guanajuato, considerado que en Apaseo El Alto y Apaseo El Grande el huachicoleo está provocando problemas de violencia y ejecuciones entre las bandas que se dedican a esta actividad?
—Es una atención muy especial que estamos poniendo en el tema de hidrocarburos y de otros ilícitos, por eso desde el principios de la administración hemos mantenido una coordinación con las autoridades de seguridad pública del estado de Guanajuato, con quienes acordamos que toda la información que ellos tienen en su C5 nos la proporcionen, y eso nos permite tener mayor efectividad.
Cada vez que se presenta una situación complicada en la frontera con Guanajuato la circunstancia nos obliga a realizar operativos en esa zona. Esta frontera que tenemos con los Apaseos la cubrimos con las policías municipales.
¿Cuál ha sido la fórmula para contener la violencia en Querétaro a pesar de tener frontera con los Apaseos, donde están desatadas las ejecuciones?
—Los operativos que hacemos son disuasivos, pero lo más importante que tenemos en Querétaro es que contamos con el apoyo de los ciudadanos y de la sociedad organizada, que nos proporcionan información cuando se requiere.
El huachicol, como se la conoce al robo de combustible, pasó de ser una actividad en donde se vendía en un pequeño jacal a pie de carretera, a convertirse en una actividad lucrativa que está generando clima de violencia en estados principalmente del centro del país.
No queremos que se desate el clima de violencia en Querétaro, y por eso estamos trabajando en el combate al robo de hidrocarburos.
¿Cuántas bandas que se dedican al huachicol tienen ustedes ubicadas en los estados de Querétaro y Guanajuato?
—Son varios los objetivos que comandan estos grupos. El robo de combustible es un delito federal, pero nosotros estamos preocupados de que el problema no se desborde, y por eso participamos en operativos.
¿Se han registrado muertes de policías por el huachicoleo?
—Por el tema del hidrocarburo, únicamente tenemos el fallecimiento de un policía municipal de Pedro Escobedo, que se dio en noviembre de 2016.
Esta baja no fue producto de un operativo, sino que lo ejecutaron cargando gasolina, y de acuerdo a las investigaciones que se hicieron por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE) se concluyó que este policía estaba involucrado con los huachicoleros.
¿Qué tan grave es el problema del huachicol en Querétaro?
—No es tan grave, el problema se ha contenido. Por la zona de San Juan del Río atraviesan tres de los ductos más importantes que hay en país, y a pesar de eso Querétaro ocupa décimo lugar en cuestión de número de ilícitos. Pemex reconoce que en Querétaro si hay una contención de la problemática, debido a que hay trabajo las 24 horas del día mediante patrullaje y monitoreo a través de cámaras.
¿Cuáles son los municipios queretanos en donde se presenta el huachicoleo?
—San Juan del Río, Corregidora, Querétaro, Pedro Escobedo, son los municipios por donde cruzan los ductos. En esa zona es donde se da el trasiego, la transportación, almacenamiento y el aseguramiento de personas.
¿El modus operandi de las bandas de huachicoleros es vender el producto en gasolineras?
—No, por lo regular lo venden en comunidades.
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