El vocero del Frente Queretano Por el Derecho a la No Discriminación y el Estado Laico, Walter López, rechaza la acusación hecha por la diputada Elsa Méndez, quien dijo en entrevista con EL UNIVERSAL Querétaro que los luchadores sociales reciben dinero por polarizar el discurso y evitar el diálogo, al tiempo que señala que México vive un cambio profundo, que grupos de ultraderecha y conservadores quieren detener con discursos divisionistas y de odio.
¿A qué se deben las acusaciones de la diputada Elsa Méndez?
—¿Qué tiene que ensuciar [la diputada Méndez] con un tema de pagos? Nuestra posición fue clara: lo vemos como una proyección sicológica. Los terapéutas te dicen: ‘Lo que te choca, te checa’, tienes que verlo al interior, porque sabemos históricamente que los movimientos antiderechos nacen en la década de los 90 y nacen financiados por empresarios, por grupos religiosos y está históricamente comprobado que crean estos grupos para llegar al poder y llevar esta ideología antiderechos a las legislaciones o detener las iniciativas en el mundo.
Estas son las luchas culturales que se están dando. En Estados Unidos, entre los demócratas y los republicanos, en Sudamérica, y bueno, Elsa Méndez es la representación gráfica que tenemos en Querétaro de todo este movimiento antiderechos que viene desde los 90.
¿Es una campaña contra las organizaciones sociales y de la diversidad sexual y feministas? ¿Trata de desprestigiar el trabajo hecho por las organizaciones?
—Son una declaraciones poco pensadas, a bote pronto, quiero pensar, y con una profunda ignorancia. Una ignorancia supina, porque esta diputada desconoce, desde el punto de vista histórico y sociológico, la importancia de los movimientos feministas y LGBT+.
El movimiento feminista tiene más de 100 años trabajando por los derechos de las mujeres y el movimiento LGBT cumple este año 50 años en el mundo y 41 en México.
De la gente que cree que esto es una moda, que entró a la Legislatura ayer y dicen que están descubriendo el mundo LGBT, el mundo feminista y no tiene esta capacidad y estos conocimientos de entender los movimientos sociales y por qué se originan y contra qué están protestando, finalmente puedo entender estas declaraciones tan facilonas de decir: ‘Bueno trato de ensuciar a esta gente con una declaraciones de este tipo’, ignorando la historia del mundo y de este país, de dónde vienen los activistas y a dónde van los movimientos feministas y LGBT.
Pareciera que quieren hacer de lado a las organizaciones...
—Tenemos que entender que hay de organizaciones civiles a organizaciones civiles. Las organizaciones que el gobierno federal está viendo, son las que sí recibían recursos. Bajaban recursos federales para programas. Ahí es donde está revisando, a mi entender. Obviamente, la crítica es que ha englobado a todas las organizaciones de la sociedad civil en esto, pero hay gran cantidad de organizaciones y a éstas es a las que está poniendo el gobierno federal en investigación, como está poniendo en investigaciones a muchas organizaciones del país.
Lo que no me parece bien que engloben a grandes organizaciones civiles con organizaciones pequeñas que nunca hemos recibido dinero, que somos amigos, que somos vecinos, que es gente con discapacidad, que somos gente que está luchando para mejorar nuestra situación en términos de leyes.
Lo que no se puede hacer es decir que todas las organizaciones de la sociedad civil son pagadas.
Las organizaciones que estamos en Querétaro luchando por los derechos de las mujeres y de la comunidad LGBT somos pequeñas que no recibimos ningún fondo federal.
¿En el Frente Queretano qué otras actividades hacen?
—Somos 11 organizaciones de la sociedad civil que básicamente trabajan en derechos humanos, son grupos feministas, organizaciones LGBT, comunitarias en general.
Somos un frente que quiere hacer políticas públicas y a través de éstas y de la ley, es como vamos a ir cambiando para mejorar el Querétaro próspero, libre, igualitario e incluyente para todas y todos.
Tenemos pocos recursos económicos, vienen de nuestros bolsillos y nos dedicamos a trabajar la agenda ciudadana incluyente, a hacer proyectos de este tipo, pero también hemos hecho navidades incluyentes, vamos hacer ahora una noche mexicana incluyente. Se hacen con recursos que salen de nuestras carteras.
¿Consideras que puedan surgir otros personajes políticos como la diputada Méndez y pongan en riesgo los derechos ganados?
—Este es el problema con esta diputada antiderechos. Históricamente el movimiento antiderechos surge con capitales empresariales y de grupos religiosos, finalmente para crear estos movimientos, como el camión naranja que vino hace unos años, que finalmente se sienten agredidos por el avance de los movimientos feministas y LGBT, porque están desmontando sus creencias y su escala de valores, tanto éticos como económicos.
El mundo está en una transformación copernicana. El mundo está con muchos problemas, la vida misma del planeta está en riesgo. No estamos hablando de movimientos sociales pequeños. Estamos hablando de la misma concepción de lo que será el humano, cómo vamos a cuidar el cuidar el planeta, cómo nos vamos a cuidar entre nosotros en medio de la violencia y la explotación que estamos viviendo ahora.