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“Cuando llegan las personas les digo que dejen por un momento su celular, aquí miramos hacia arriba, no para abajo”.
Con esa frase, Belem Martínez (quien es el coordinador al frente del Planetario “Dr. José Hernández Moreno” ubicado en el municipio de Cadereyta de Montes, el único en su tipo en todo el estado), reflexionó sobre lo el significado de estar al pendiente de lo que sucede más allá del cielo terrestre, es una invitación a observar por la mirilla del telescopio la estrella y el sustento de nuestro sistema: el sol.
Una mirada en directo a la principal fuente de energía de nuestro planeta. Se observan sus zonas activas, sus manchas solares y eyecciones de plasma de la corona, que gracias a los filtros de los lentes del telescopio, se ilumina en un tono entre rojizo y anaranjado.
A pocos minutos de la cabecera municipal, se encuentra un santuario cósmico donde para Belem, se recupera la capacidad de asombro de las personas gracias a la tecnología y al conocimiento que se ha logrado con el constante estudio del espacio: los planetas, las estrellas, nebulosas, los sistemas solares y galaxias lejanas, como dicen por ahí.
Es interesante y apasionante el mundo de los cuerpos celestes en el espacio, para Belem quien brinda una detallada explicación, ayuda a los visitantes que llegan al planetario a visualizar el sol o eventos especiales (como el eclipse parcial de sol de este lunes 21 de agosto) y parte de su actividad, al momento, gracias al potente telescopio con el que cuentan y que tienen disponible para magnificar la experiencia astronómica. Lugar que alimenta la curiosidad pues entre más se observa, surge en la persona un mayor interés por conocer qué hay más allá de la atmósfera terrestre.
Herencia paternal.
El Planetario abrió sus puertas en junio de 2015 y desde ese momento se catapultó como una nueva forma de entretenimiento pero con la gran diferencia de aportar conocimiento a sus visitantes. “Una forma de educación no formal, no escolarizada pero que deja aprendizajes”, indicó Belem Martínez, licenciado en educación que heredó la pasión por el firmamento gracias a su padre, por lo que desde niño se despertó su pasión por voltear a ver las estrellas noche tras noche.
“Entré en esto como aficionado, mi padre me enseñó mucho sobre la posición de las estrellas, él tuvo como grado máximo de escolaridad tercero de primaria por allá de los años cuarenta, y desde entonces le gustó observar el cosmos, a mi hermana y a mí nos contagió ese gusto”, platicó con EL UNIVERSAL Querétaro.
Originario de Cadereyta, Belem y su hermana colocaban un petate en el patio de la casa de su padre para tenderse a ver las estrellas y así comenzó a conocer los nombres de las constelaciones, las épocas en las que son visibles, los ciclos y movimientos espaciales.
“Después me hice de un telescopio, hacía observaciones y de esa manera comenzar a dar pláticas de astronomía en el Jardín Botánico Regional que también está en Cadereyta antes de la construcción de este planetario”, contó el coordinador.
Desde su apertura y gracias a las pláticas sobre astronomía que brindaba, Belem fue considerado para coordinar el planetario que hace honor al segundo mexicano (aunque tiene doble nacionalidad como estadounidense) que viajó en transbordador al espacio.
Gracias al bagaje obtenido a lo largo de sus observaciones como aficionada, con la intención de aportar conocimiento de acceso fácil y ligero al visitante.
“Tratamos de darle esa connotación, que sea un centro educativo no formal, pasar la información a las personas y que se recupere la capacidad de asombro, todas los días les digo a los visitantes que dejen el celular a un lado, porque aquí miramos hacia arriba y no para abajo”, comentó.
Junto a Belem trabajan tres personas más, quienes han recibido capacitaciones por parte del mismo coordinador para ofrecer explicaciones en caso de que el número de visitantes sea alto.
Sin duda, el eclipse solar parcial que se vivirá el día de hoy hace que se avive la curiosidad por el comportamiento de los astros, aunque normalmente el planetario cuenta con un flujo regular de personas, sobre todo los fines de semana.
Viaje por el Sistema Solar.
El costo de acceso es de 50 pesos por adulto y 35 pesos para niños y adultos mayores, con lo que los visitantes tienen acceso a una proyección dentro del planetario en la que se hace un viaje por nuestro Sistema Solar, además de dos videos documentales: Safari cósmico en el que se hace uso de la imaginación para poder analizar cómo sería la vida en otros planetas tomando como referencia los principios de la vida terrestre, así como el video titulado La luz a través del brillo del color en el que se analiza a detalle el origen de la luz, su velocidad y otras características.
Alexis Romero, joven originario de Cadereyta, es el encargado de la proyección y la explicación de lo que se proyecta en la cúpula digital. Antes de la proyección de las 13:00 horas, Alexis, ingeniero sistemas computacionales de profesión, ahondó sobre la vida del astronauta mexicano por el que se nombró el planetario.
“La del doctor José Hernández Moreno es una historia de motivación y perseverancia, estuvo durante 12 años tratando de entrar a la NASA y hasta la doceava vez fue cuando lo aceptaron, donde también logró que lo incluyeran en el programa de transbordadores espaciales, es algo que les decimos a los niños que vienen para que sepan que con esfuerzo y perseverancia se pueden lograr las cosas”, indicó el joven que comenzó a laborar al planetario de Querétaro unos meses después de su apertura.
En la proyección principal se hace un detallado recorrido por todos los planetas con sus satélites que componen el Sistema Solar, además, del análisis de la influencia e impacto solar en cada uno de los planetas acorde a sus características.
Todo visto en una proyección de alta calidad, en una sala para más de 70 asistentes. Son cinco proyecciones al día, cada hora, a partir de las 12:00 horas. Además los jueves y sábados, el planetario queretano ofrece observaciones del firmamento nocturnas donde contados visitantes (se realizan con un aproximado de 15 personas) pueden disfrutar del firmamento a detalle, aunque es una actividad que depende de las condiciones climáticas para llevarlas a cabo.
Vista al sol. Además de las proyecciones, el lugar cuenta con una galería fotográfica donde se aprecian detalles del cosmos, mientras que al fondo del lugar, Belem Martínez, invita a subir a quienes abandonan la sala del planetario, para que observen por la mirilla del telescopio que apunta directamente al la gran estrella.
Algunos no creen que estén viendo en directo el sol, que rige nuestro planeta, pero el coordinador explica a detalle lo que se observa.
La superficie solar rojiza con sus zonas activas, que se ven pequeñas pero en realidad es una actividad que mide miles de kilómetros, sin embargo la escala de la visión sirve perfectamente para magnificar la impresión de los visitantes.
Es el gran atractivo del lugar y para Belem, es más que un trabajo el estar al frente del planetario donde se fomenta el conocimiento de los astros y el firmamento que invita a dejar de lado el celular y miras con mayor detenimiento hacia el cielo y lo que existe más allá de la atmósfera terrestre.
