Más Información
El perro o el gato de la familia no siempre se quedan solos en casa mientras sus dueños pasan las fiestas decembrinas en la playa o con la familia que vive en otras ciudades; también existen las mascotas viajeras, aquellos que viajan en el maletero del camión o avión y acompañan a sus humanos.
Monserrat González y su perrita mestiza llamada Alonsa, por el personaje de una película animada, han viajado tres veces juntas desde Querétaro a San Luis Potosí, un viaje de aproximadamente tres horas en un camión foráneo, pero que representó un verdadero reto para ella y para el animal.
“Es difícil cuando viajas por primera vez con tu mascota porque no sabes bien qué debes hacer, en dónde debes transportarla, si la mascota va estresada o no, pero si te asesoras con un veterinario todo es más sencillo. Yo prefiero viajar con ella a dejarla sola en la casa”, comenta.
Para ese primer viaje, la línea de autobús Primera Plus dio la instrucción de que el animal debía viajar en el maletero del camión, en una jaula transportadora y bajo los efectos de algún tranquilizante prescrito por el veterinario.
Como era de esperarse, comenta Monserrat, su perrita se mostró ansiosa al iniciar el viaje, pero una vez que llegaron a su destino se dio cuenta que todo transcurrió con normalidad. Después de ese viaje vinieron otros tres viajes más, en cada uno Alonsa se mostró más tranquila.
Pablo Cruz también ha viajado con su perra Mirra, de raza pastor ovejero australiano. Lo hizo hace dos años para pasar la Navidad y el Año Nuevo con su familia que vive en la Ciudad de México, así que Pablo y Mirra viajaron desde Querétaro. La situación fue similar, una transportadora con suficiente espacio para que el animal se sienta cómodo y un viaje de tres horas que no presentó ningún problema.
A diferencia de Alonsa, Mirra está acostumbrada a su jaula transportadora y ni siquiera tuvieron que darle ansiolíticos.
“Ella no tiene problema con viajar en la transportadora, a veces viajamos en camioneta y ella va dentro de su jaula, me la llevé porque no quise que se quedara sola, no podía quedarse nadie con ella, además nos gusta estar juntos, a mucha gente nos gusta que nos acompañen nuestras mascotas”.
El caso de Alejandro Jáuregui es distinto, él y sus perras Luki, una Fox Terrier y Kia, una Pastor Belga, han viajado en su automóvil particular, para no batallar con los requisitos que piden las aerolíneas.
Alejandro lamenta que en Querétaro no existan lugares suficientes para turistas que visitan la ciudad acompañados de sus mascotas, pues dice, ese mismo problema ha enfrentado él en otros sitios turísticos.
“Cada una tiene su jaula, pero a mí me parece muy engorroso todo el procedimiento que te piden, por ejemplo, para subirlas a un avión. Hemos viajado mejor en nuestra camioneta. Además yo me he topado con el problema de que no hay muchos lugares amigables con los perros, no hay hoteles, no hay restaurantes, son muy pocos los lugares donde podemos estar juntos.
“Aquí en Querétaro vas al parque 2000 y no te dejan entrar con perros, vas al cimatario y tampoco, están muy reducidas las opciones. Esa sería la petición, o sea, uno hace un esfuerzo por viajar con sus mascotas, tenemos esa cultura, pero luego se encuentra uno con estas cosas. Mi perra es muy tranquila, muy sociable, aquí en Querétaro me la llevo a la Cañada, a las presas de Santa Rosa, son los lugares a los que puedo ir con ellas”, señaló.
Evitar errores comunes
Administrar ansiolíticos a la mascota sin el consentimiento del veterinario, transportar al perro o gato en una transportadora que no es la indicada para su tamaño y no ayudar a que el perro se acostumbre previamente a la jaula transportadora, son algunos de los errores recurrentes que las personas cometen al momento de viajar con sus mascotas.
La médico veterinario, Laura Angélica Domínguez, explica que el ansiolítico o medicamento que se administra a la mascota antes del viaje, es un tranquilizante que no debe dejar inconsciente al animal, pues en caso de alguna inspección al avión o autobús, no podría comprobarse que la mascota esté bien.
Laura detalla que el ansiolítico debe ser autorizado sólo por veterinarios, quienes determinan el tipo y la cantidad de medicamento de acuerdo a la edad y peso de la mascota.
“Siempre pedimos que cuando viajen con mascotas vayan antes con un veterinario, porque cada medicamento va de acuerdo al peso del animal, no es lo mismo para todos los perros o gatos. Además siempre tratamos de que los tranquilizantes sean naturales para que no causen algún síntoma molesto para la mascota. Es importante mencionar que recetar tranquilizantes a un perro no es que el animal se quedará inconsciente, esa es una idea errónea que tiene la gente, es sólo para bajar sus niveles de estrés”, mencionó.
La elección de la jaula transportadora también es de vital importancia para el perro o gato que viajará en el avión o camión foráneo. Lo recomendable es que el animal tenga suficiente espacio en la transportadora para estar completamente de pie y poder acostarse, si el animal está cómodo, comenta Laura, el viaje será menos estresante para él.
“La jaula debe tener un tamaño adecuado para el perro, incluso marcan la cantidad de peso que pueden soportar, el animal debe tener suficiente espacio para que no esté incómodo, para que pueda relajarse, echarse y todo eso. Es importante que revisen esas cosas antes de elegir una transportadora, porque si el perro tiene también demasiado espacio libre puede estar rodando de un lado a otro por los movimientos del avión o del camión”, aseveró Laura Angélica.
“Hemos visto un aumento importante en el número de personas que prefieren viajar con sus mascotas, antes llegaban aquí a la veterinaria a preguntar por pensiones pero ahora vienen más bien para que administremos ansiolíticos, o vienen a elegir transportadora. Ya hay gente que se preocupa por llevar a sus mascotas con ellos”, dijo.
Otro error que puede evitarse y que ayudará a que la mascota sienta menos estrés durante el viaje, es lograr que el animal se acostumbre previamente a la jaula transportadora. Laura detalla que desde una semana antes del viaje se puede practicar con el perro o gato, por ejemplo darle de comer, encerrarlo en la jaula por un tiempo y posteriormente dejarlo salir. Eso le hará entender que no está en peligro cuando sus dueños lo guardan en la transportadora.
Requisitos de aerolíneas y líneas de autobuses
En el caso de los animales de apoyo emocional o alerta médica, tanto aerolíneas como autobuses coinciden en que la mascota puede viajar con su dueño en la zona de pasajeros siempre y cuando se presente un certificado médico, en este caso los animales deberán viajar en los espacios sugeridos para animales.
Si la mascota no es de apoyo emocional, las líneas de autobuses plantean los siguientes requisitos: viajar en maletero del camión y en jaula transportadora, para evitar el estrés del animal se pide administrar un tranquilizante, evitar que la mascota viaje más de ocho horas y a una temperatura mayor a los 30 grados, además de llevar certificado de salud y vacunación en caso de que se realice alguna revisión fitosanitaria.
En el caso de los aviones también se debe presentar certificado de sanidad y cartilla de vacunación, llevar a la mascota en jaula transportadora, por lo que cobran 900 pesos, la jaula y el animal no deben pesar más de 45 kilos en conjunto. Si la jaula mide más de 158 centímetros totales (alto, largo y ancho) se deberá cubrir un cargo adicional por sobredimensión; estos son requisitos de la aerolínea Volaris, el peso permitido y la cuota a pagar pueden variar dependiendo la aerolínea por la que se viaje.
Se debe etiquetar la jaula con datos de contacto del dueño, además del nombre edad, sexo e instrucciones de alimentación de la mascota. Darle de comer al menos cuatro horas antes del vuelo. Las aerolíneas recomiendan no sedar a la mascota pues hacerlo incrementa el riesgo de sufrir ataques cardíacos.
Algunas aerolíneas no permiten viajar con ciertas razas de perros y gatos, los cuales, debido a su fisonomía presentan el hocico corto, son chatos y con cabeza ancha, por ejemplo Boxer, Pit Bull y Pug y en gatos Burmes, Persa o Himalayo, entre otros, pueden presentar dificultades para respirar y golpes de calor.
En algunos casos, si la mascota pesa menos de 10 kilos se puede adquirir un servicio para que viaje junto con su dueño, siempre dentro de una transportadora.
Generalmente las aerolíneas piden a los dueños de las mascotas que se presenten previamente para la documentación del equipaje y de la mascota.
Se debe presentar los documentos necesarios en el area de servicio al cliente, llenar un formato, realizar el cargo requerido por transportar al animal y permitir que un asesor verifique que la mascota cumple con las características necesarias para viajar.