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Alguna vez se ha escuchado a un amigo o familiar decir que las fiestas decembrinas o el invierno pueden provocarle depresión blanca, concepto que hace referencia al color de la nieve, además de que el ambiente se torna gris y con bajas temperaturas, todo esto conlleva a que haya una disminución en el ritmo de vida que se tiene durante otras estaciones del año.
Depresión blanca inexistente
La depresión blanca no existe en Querétaro ni en México, aseguró Juan Carlos García Ramos, integrante del Colegio Estatal de Psicólogos; sin embargo, dijo que puede haber una caída en el estado de ánimo de la gente, al existir bajas temperaturas y en la cantidad de luz solar.
“La depresión blanca no existe (…) parece haber cierta tristeza, cierto desánimo, apatía, pues la consideración de la fecha, sobre todo los países nórdicos donde el invierno provoca nieve, se hace referencia a la blancura de la nieve, pero en Querétaro, la depresión blanca no, más bien la fría, pero estamos muy acostumbrados a incorporar conceptos de otros países y no es lo mismo que ocurre en el centro del país”, explicó García Ramos.
Diciembre y fiestas navideñas positivas
El especialista explicó que las fiestas navideñas son positivas para todas las personas porque incrementa la cercanía con la familia y los amigos.
Otra de las razonas por las que diciembre es bueno para incrementar el ánimo, es que hay una mayor percepción de dinero; el recibir aguinaldo, dijo García Ramos.
“La incidencia en consulta de pacientes disminuye en esta temporada, esta cuestión es porque prefieren más las vacaciones que acudir con el psicólogo (...) No es cierto que en Querétaro se incremente el número de suicidios en diciembre, en mayo y agosto hay más casos”, destacó.
Sin embargo, este año, diciembre tiene una característica diferente, y es ser el tercer mes posterior al terremoto del 19 de septiembre, situación que, explicó el sicólogo, es el periodo considerado clínicamente para evaluar si las personas que estuvieron afectadas de forma directa o indirecta por el temblor, presentan algún síntoma depresivo.
“Podrían presentar una continuidad de síntomas, tener una depresión, un estrés crónico, sería el mes que donde las personas que no han superado lo vivido por los sismos, aquí se empieza a generar un diagnóstico clínico para ellos”, puntualizó.
Estadísticas
De acuerdo con García Romos los jóvenes son los que más intentos de suicidio comenten, en un rango de edades de los 14 a los 29 años; sin embargo, son las mujeres las que más lo intentan, pero los hombres son los que más lo logran.
Las cifras anteriores coinciden con los datos proporcionados por la Secretaría de la Juventud de Querétaro (Sejuve), donde se indica que en 2016, 77% de los suicidios concretados fueron cometidos por hombres, mientras que las mujeres sólo lo lograron un 33%.
“La estadística habla que son más los hombres, en una relación de 4 a 1 y a la inversa los intentos. Por alguna razón las mujeres lo intentan más veces sin lograrlo, quizá porque utilizan métodos no letales, se toman cinco pastillas, en cambio los hombres usan métodos más efectivos, como el ahorcamiento o usan armas de fuego o blancas”, especificó.
La mayoría de los suicidas son jóvenes con un rango de edad en los 21 años, además de que en la capital queretana es donde más casos hay, así lo registra Sejuve.
Al último corte que tiene la dependencia (junio de 2017) ha habido 25 suicidios, de los cuales, cuatro fueron cometidos por jóvenes menores de 18 años; 17 suicidas estaban entre los 18 y 25 años; y cuatro entre los 26 y 30 años.
García Romos puntualizó que hay 30% de probabilidad de que alguien que atentó contra su vida una vez, lo intente de nuevo por no tener tratamiento adecuado.
“Porque a veces el tratamiento no es adecuado, además de que no pueda resolver su problema, su estado de ánimo tarda en equilibrarse, sobre todo que cuando una persona lo intenta sin lograrlo, se médica, se le dan antidepresivos que tardan 25 días en estabilizar el ánimo, pero en ese tiempo inicial lo vuelven a hacer”, refirió.
Síntomas de pacientes con riesgo suicida:
El área de atención y prevención de la conducta suicida del Centro Estatal de Salud Mental (Cesam), indica que los trastornos mentales presentados por pacientes con riesgo de suicidarse, atendidos durante el primer semestre de 2017, son episodios depresivos, trastornos depresivos y trastorno de ansiedad.
Los factores de riesgo más detectados por el Cesam son problemas familiares, consumo de sustancias y violencia.
Además, los síntomas presentados en el paciente con riesgo suicida son problemas para dormir, bajo apetito, ideas suicida, irritabilidad y conductas autolesivas.
El Cesam atendió 341 jóvenes, entre 12 a 29 años, con riesgo suicida durante la primera mitad del año, de los cuales 235 son mujeres y 106 son hombres, siendo mayo el mes con mayor incidencia.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), asegura que cada 40 segundos se suicida una persona en alguna parte del mundo y muchos más los intentan sin éxito. Siendo la segunda causa más frecuente en muerte de jóvenes de entre 15 y 29 años de edad a nivel mundial.
Algunas de las recomendaciones que emite el organismo mundial es la creación de una estrategia nacional que haga de la prevención del suicidio una prioridad multisectorial que incluya no solo al sector salud, sino también a los rubros de educación, empleo y bienestar social.
Estas organizaciones también hacen la invitación para que sean creados programas de ayuda a las personas.
