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Con resguardo de la policía estatal queretana, protección civil y bomberos de Querétaro inició la travesía de paisanos que vuelven a México por medio de la Caravana del Migrante, que salió ayer de Laredo, Texas.
A las cuatro y media de la mañana los motores de las camionetas que conformaron la tremenda fila tardaron hasta dos horas para pasar la frontera del puente Juárez-Lincon.
Con una fresca madrugada comenzó el éxodo de migrantes que visitan las tierras mexicanas de diferentes estados como Zacatecas, Michoacán, Jalisco, San Luis Potosí y Querétaro.
En los más de mil 400 vehículos escritos viajan cerca de 7 mil personas que aprovechan esta temporada vacacional para reunirse con la familia.
Los viajantes que tienen como destino Jalpan de Serra en la zona serrana fueron recibidos cerca de las nueve de la noche.
El Secretario de Desarrollo Social, Tonatiuh Cervantes Curiel, en representación del gobernador Francisco Domínguez , detalló: “queremos decirle a la población de México que nos ayuden durante el arribo de los migrantes queretanos, de San Luis, de otros estados, Hidalgo, Michoacán. Queremos que lleguen con seguridad, estamos en un ejercicio de escuchar a los migrantes…y tratar, dentro del ejercicio de gobierno, de atender sus inquietudes, que tienen qué ver con el bienestar de sus familias” dijo.
Recordó que la finalidad de la Caravana del Migrante es garantizar el regreso seguro de nuestros paisanos, como lo ha sido desde el 2010, año en que se realiza la primera edición en la que fueron 35 autos registrados con 100 connacionales, cifras que ha crecido año con año y que hacen fuerte a esta caravana.
Cervantes Curiel dijo que “nosotros estuvimos haciendo trabajo de vinculación por parte de Gobierno del Estado facilitando el acceso de nuestros connacionales a través de calcomanías distintivas. Es el quinto año que se participa con ellos. Además se les está enviando siete vehículos de seguridad por parte de gobierno del estado, cinco del municipio de Corregidora, protección civil y bomberos durante toda la ruta, cuyo recorrido comprende unas 15 a 16 horas”.
Desde el 2010, se han conjuntado esfuerzos entre los tres niveles de gobierno, apoyados por la sociedad civil; derechos humanos, Diócesis de Querétaro, 59 Legislatura; así como el SAT, aduanas, migración, gobiernos estatales de Tamaulipas, Nuevo León, San Luis Potosí, Zacatecas, Hidalgo, el Senado de la República; el gobierno norteamericano, los consulados y se sumaron elementos de la Guardia Nacional.
El gobierno del estado a través de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOQ), dijo, tiene incidencia desde la planeación, logística y montaje de la Caravana, mediante la intervención de personal de apoyo que asiste con antelación a las ciudades de Laredo Texas y Laredo Tamaulipas, a fin de verificar espacios en los que se llevan a cabo las reuniones de los migrantes para su debido acompañamiento.
La ruta en este año fue salir de Laredo, Texas, cruzar Avenida San Bernardo, Puente Juárez-Lincoln, Monterrey, Saltillo, Matehuala, Huizache, Río Verde San Luis Potosí, San Ciro de Acosta, Arroyo Seco y Jalpan de Serra. Otra ruta continuará por municipios cercanos a la capital queretana y estados vecinos.
El organizador de la Caravana y fundador de la misma, Fernando Rocha Mier, señaló que en el año 2010 se organizó la primera Caravana, debido a que tradicionalmente los migrantes tienen el problema de que a su regreso a México los extorsionan agentes aduanales y policías.
Pero adicional a ello, refirió que desde 2010 “se incrementó la violencia y era insoportable esa situación para migrantes que sufren en la frontera odio, sangre y violencia, al ser victimas de secuestros y crímenes”.
En aquel entonces, en 2010, recordó que se registró un hecho que sacudió a la sierra gorda de Querétaro, principal zona expulsora de mano de obra hacia Estados Unidos: “en dos camiones en el que viajaban migrantes del municipio Landa de Matamoros, Querétaro, desparecieron y hasta el momento no se tiene un solo rastro de ellos”.
“La Sierra Gorda, en Querétaro conformada por los municipios de Landa de Matamoros, Jalpan, Pinal de Amoles y Arroyo Seco, es considerada la principal zona expulsora de personas a los Estados Unidos, se tiene una población de 130 mil habitantes, de los cuales se calcula que 35 mil se encuentran trabajando en Estados Unidos”.