Para Carmen Solís, los procedimientos de mejora estética dejaron de ser un tabú para convertirse en una experiencia satisfactoria. Hace dos años le inyectaron una jeringa de ácido hialurónico, para dar más volumen en los labios, el costo fue de 5 mil pesos y el efecto duró 18 meses, pues la sustancia se desvanece con el paso del tiempo.
Según relata la mujer de 38 años, para realizar dicho procedimiento no quirúrgico sólo tuvo que llamar a la clínica y agendar una cita, no hubo ninguna consulta médica. Sin embargo, además de investigar en internet, Carmen se asesoró con una de sus amigas especialista en cirugía estética y que radica en Ciudad de México.
“Hasta cierto punto yo fui muy confiada a realizar este aumento de labios, porque me asesoré con un profesional y de hecho mi amiga me recomendó la clínica a la que fui; me dijo que tenía que ser cuidadosa de que el producto y las jeringas deben abrirlas delante de ti, por seguridad e higiene, y la verdad es que en mi caso no lo hicieron así, si tienes que confiar un poco en ellos, en ese sentido”.
“Creo que el tema de las modificaciones estéticas cada vez es más común, ya no se ocultan este tipo de cosas, yo en mi caso no tuve problema con que la gente supiera que aumenté el volumen de mis labios, creo que es como pedir cualquier otro servicio, cada vez deja de ser un tema tabú”.
A pesar de que Carmen Solís tuvo una experiencia satisfactoria con su pequeña modificación estética, reconoce que los peligros son latentes, por lo que aconseja asesorarse y acudir a lugares seguros. Actualmente considera hacerse un segundo aumento de labios, aunque esta vez espera acudir con un profesional conocido para tener un procedimiento seguro.
Según el médico José Antonio Meré Gómez, quien tiene una especialidad en Medicina Estética y Antienvejecimiento, con un master en Cirugía Estética y Proceso de Aceptación por la American Academy of Cosmetic Surgery, una cirugía estética es una intervención quirúrgica realizada para mejorar un aspecto físico, a diferencia de la cirugía reconstructiva, que se utiliza para mejorar alguna parte del cuerpo dañada por un accidente o malformación.
En su experiencia, el 80% de sus pacientes son mujeres. Asegura que durante muchos años la cirugía estética fue un tema tabú, difícilmente aceptado por los hombres, sin embargo, con el tiempo dicha percepción ha mejorado.
Las cirugías más frecuentes son aumento mamario, cirugía de párpados, aumento de labios y liposucciones.
“Es muy importante que las personas acudan con profesionales, que les expliquen cada procedimiento, que utilicen los medicamentos permitidos y adecuados, actualizados en los lineamientos de COFEPRIS y la Secretaría de Salud".
“El internet es bueno y malo para todo, puedes encontrar que una cirugía estética es lo mejor del mundo como puedes encontrar quien diga que es lo peor del mundo, por eso la gente debe informarse realmente con las personas adecuadas, si tu quieres arreglar tu drenaje buscas a un plomero, no buscas en internet cómo hacerlo, es lo mismo con nosotros, tienen que acudir con especialistas, que expliquen por qué sí, por qué no, que respondan todas sus dudas”, comenta el especialista.
Para José Antonio Meré, la consulta previa es tan importante como la cirugía misma, pues es el momento en el que conoce las razones por las que el paciente quiere realizar la cirugía estética. En estas consultas médicas, es importante que los pacientes sean sinceros con el doctor, pues de eso depende el éxito del procedimiento.
“Es muy importante porque es el primer contacto con el paciente, durante la consulta se hace una valoración médica, se revisa el historial del paciente, se ve si es posible lo que el paciente quiere; algunas personas quieren alguna cirugía que no es posible por su estructura fisionómica, yo tengo que ser sincero con ellos y ellos conmigo al momento de hacer la historia clínica".
“Puede ser que te omitan alguna información, aunque crean que no es importante y al momento de la operación puede haber alguna variación de la frecuencia cardíaca o que el paciente no esté coagulando, etc”.
De acuerdo a las estadísticas de la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS), México ocupa el tercer lugar dentro de un ranking mundial pues durante el año 2016 se realizaron más de 900 mil cirugías estéticas, procedimientos entre los que también se encuentran los procesos no quirúrgicos como las inyecciones de botox o ácido hialurónico.