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Madrid, España.-
Ser madre soltera es estar sola; aunado a la cuarentena se tiene que guardar más precaución y esconder todo el miedo por el futuro. Se debe guardar la incertidumbre en un cajón y disfrutar los días, los años que dure lo más hermoso que hay en este mundo: la maternidad.
La maternidad en tiempos de pandemia, pese a ser excepcional, se parece en lo esencial o perjudicial en días normales, sin el pretexto del tiempo.
Estefanía Joys E. Vargas, nacida en Lima, Perú, vive desde hace 13 años en Madrid, su primer trabajo en la capital española fue cuidar de niños y ancianos. Con el paso del tiempo juntó dinero para pagarse estudios en prótesis dental, y mientras estudiaba trabajaba en restaurantes mexicanos.
En el 2014 Joys trabajaba y estudiaba, ese año llegó a su vida la bendición más grande y se convirtió en mamá de Alessandra, una niña con mucha vitalidad, alegre y muy estudiosa.
“Al principio no sabía que me quedaría sola manteniendo y criando a mi niña, luché mucho por estar con su padre hasta que las circunstancias de la vida me convencieron de que era mejor sacar la casta y echar para adelante mi vida sola”, relata.
El 2019 fue un año de mucho trabajo y mucha reflexión para Joys, llevaba buscando trabajo y no encontraba ninguna oferta. Joys seguía laborando en restaurantes. Fue entonces que decidió buscar un socio y abrir su propio restaurante de comida peruana. Sin embargo, no imaginó que una pandemia se llevaría miles de euros, los ahorros de toda su vida.
“Soy madre de una niña de seis años, estoy en pausa y tratando de digerir todo esto. Mi niña no puede ir al colegio, toma clase una vez por semana desde casa. Cuando todo esto pase no sé cuál será el panorama de nuestras vidas, pero madre seguiré siendo y tendré que sacar fuerzas y recursos para salir adelante”, asevera.
Joys es una mujer fuerte y responsable, sale a caminar en los horarios que se fijaron hace una semana en la zona cero en España para poder darle un paseo a los niños. Usa cubrebocas, guantes y mantiene la sana distancia. Es probable que las escuelas reanuden las actividades en septiembre, con un aforo de 50% de la capacidad normal, pero se desconoce cómo serán elegidos esos sitios para los niños.
“Ser madre soltera y lanzarme a poner un negocio no me deja claro cuál será mi futuro. Estoy en contacto con personas que antes me dieron trabajo y creo que voy a retomar el regreso a ser empleada, mientras que veo con mi socio cómo sacar adelante mi restaurante”, expresa la joven.
Las medidas que ha tomado el gobierno español hasta el día de hoy para los restaurantes, cafeterías y bares es la autorización de abrir sólo para vender alimentos y bebida para llevar. Muchos empresarios han optado por esperar la fase 3 argumentando que no reditúa volver con esas condiciones.
El confinamiento en España, por más de 50 días dejó una histórica crisis económica que traerá consigo el traspaso, venta y desaparición de miles de negocios. Por las cifras y características será muy similar a la crisis que estalló en aquella nación en 2008.
