La primavera y las primeras vacaciones de la temporada están cada vez más cerca y es por ello que la supermodelo plus-size, Ashley Graham, nos llevó junto a su madre, Linda, a las playas paradisiacas de Morocco para desear (aún más) el sol, el calor y los trajes de baño.
La nueva campaña de Crucero 2018 de la firma Swimsuits for All tomó como inspiración a estas mujeres para dar un mensaje positivo hacia el cuerpo humano. Esta estrategia pretende abrir el aspecto hacia cómo concebimos el cuerpo femenino en la playa y luchar para que los discursos de moda sean más inclusivos.
A su vez, la madre de Graham declaró a una entrevista para la revista Vogue que se sentía “muy feliz de lucir cómoda y feliz a sus 53 años con un bikini y sobre todo compartir este momento a lado de su hija”.
A esto, Graham también declaró es la entrevista que ella estaba emocionada desde un principio. “Yo estaba super emocionada, es más, yo les dije: no le pregunten, avísenle que va hacer la campaña conmigo… ¡no tenía opción!”.
Para concluir, Graman expuso su preocupación hacía el empoderamiento femenino: “ Lo que busco en mujeres que tienen mi edad o la edad de mi madre es que se sientan empoderadas y que sepan que pueden verse igual de hermosas que cualquier otra usando un traje de baño de una pieza o con un bikini. Creo que la belleza va más allá de la edad, raza o talla y definitivamente no tiene nada que ver con qué etapa de tu vida te encuentres.”
