Coincidencia o simplemente ganas de anónimos por figurar, los llamados Tres Amigos han tenido en común ser relacionados con el plagio.
El primero en la lista fue Alfonso Cuarón, quien se encontraba volando hacia México en 2014, cuando se enteró que una escritora demandaba a los estudios de cine Warner por copiar Gravedad.
Dos años después, en 2016, en redes circuló un video en el cual se comparaban varias escenas de El renacido, dirigida por Alejandro González Iñárritu, similares a las de cintas hechas por el ruso Andrei Tarkovsky (Solaris y La infancia de Iván).
Ahora tocó el turno a Guillermo del Toro, a quien en redes comenzaron a señalar por el presunto parecido de La forma del agua, la cual contabiliza hasta ahora 65 premios internacionales entre ellos el Globo de Oro a Mejor Director, al corto holandés The space between us, de 2015.
Semanas después de haber obtenido el Oscar a Mejor Dirección, Cuarón se sorprendió con los reclamos de Tess Gerritsen.
La escritora demandaba a los estudios Warner, que él había comprado su novela Gravedad en 1999 y con encontraba similitud.
La novela es protagonizada por una doctora atrapada en el espacio después de que un organismo infecta a sus colegas astronautas y los mata. Su esposo, que está en la Tierra, lucha contra los esfuerzos para dejar a su mujer en el espacio abandonada.
Gerritsen aducía que había escenas similares y pedía 2.5% de lo ganado en taquilla global, que superaba 700 millones de dólares. Primero la autora no denunció, pero cambió de opinión cuando se enteró que Cuarón formaba parte, según ella, del Proyecto Gravity de Gerritsen y estuvo trabajando en la adaptación de su libro a la pantalla. Hasta ahora no ha habido resolución, al menos pública, del caso.
Semanas antes de los Oscar 2016, en Vimeo comenzó a circular un video comparativo de casi tres minutos de duración.
Replicado en pocas horas (ahora alcaza 850 mil reproducciones), se mostraban escenas de El renacido y películas de Tarkovsky.
En varios de los comentarios del video copiado en YouTube, los usuarios descalificaban la comparación y afirmaban que no había nada malo. Nunca hubo cuestiones legales al respecto.
En los inicios de su carrera, González Iñárritu reconoció que en su años mozos, al ver por vez primera la obra de Tarkovsky, quedó impactado profundamente. “De repente me dí cuenta que una película podía tener gran cantidad de significados”, apuntó.
En agosto pasado el sitio Awards Watch fue el primero en mencionar similitudes entre la cinta de Del Toro y el corto holandés The space between us, dirigido por Marc S. Noellkaemper.
El tapatío inició la idea de La forma del agua en 2011, cuatro años antes de dicho cortometraje, tras una reunión con el escritor Daniel Kraus.
En 2014 le presentó el proyecto a los estudios Fox y dos años después la estaba filmando. Ahora es una de las fuertes candidatas a los Oscar 2018, cuyas nominaciones se conocerán el martes. (Redacción)