En la boda Meghan Markle y el príncipe Harry pudimos ver atuendos en tonalidades pasteles y con estampado floral; sin embargo, la duquesa de Sussex nos conquistó con un vestido muy elegante y natural diseñado por Clare Waight Keller, de la firma Givenchy que consistió en una prenda con escote barco y manga francesa que la hizo lucir muy sofisticada.
Y si te quedaste con ganas de ver a Meghan en una prenda menos formal, la duquesa de Sussex nos sorprendió con un segundo vestido a cargo de Stella McCartney con el que lució un poco más arriesgada gracias a su diseño con cuello halter, y un corte con cola de sirena fluida.
Foto: REUTERS
Meghan añadió a su sexy atuendo unas zapatillas blancas firmadas por Aquazzura y un anillo que perteneció a la princesa Diana en tonalidad azul. Su maquillaje simple y discreto hizo que no perdiera la línea minimalista con la que la vimos llegar a la Capilla de San Jorge del Castillo de Windsor.
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