Hasta a la gente le gusta reír con uno que otro chascarrillo de barrio. Sin embargo, el hecho de que el público viva en la zona de Interlomas no los salva de ser el blanco de uno que otro comentario perspicaz y tierno de un payasito en el escenario.
Incluso a él le cuesta trabajo no reírse de la carrilla que les echa a “las personas con dinero que vinieron a ver mi show”, dice Chuponcito en el escenario del Teatro del Parque Interlomas.
El payaso saca de la manga a dos personajes extras, a su madre y a un pistolero revolucionario muy macho. Las rutinas cómicas provocaron las carcajadas del público emporifollado, que entre chistes para adultos se desestresó.
Chuponcito es un payaso reconocido por su ternura a la hora de contar chistes, sin embargo, también tiene su versión XXX y lo aclara, para que no haya confusiones ni engaños.
“A mí no me gusta que vengan chavitos a estos shows, porque éste es otro lenguaje sólo para grandes”, expresa en el escenario.
Con un show alejado de la escenografía estrafalaria e incluso sin grandes talentos malabarísticos, por no decir que ninguno, Chuponcito provocó lágrimas de risa.
Incluso se permitió sostener la diferencia entre pobres y ricos, haviendo burla del público y hasta de sí mismo... “Total, ya me pagaron mis 200 mil pesos”, bromeó.
