El actor Ricardo Velderrain es originario de Los Mochis, Sinaloa y gracias a su talento, espontaneidad y carisma, se ha posicionado como uno de los artistas consentidos para las series televisivas.

A lo largo de su carrera ha participado en proyectos como Los Héroes del Norte, La Hija Pródiga y El Señor de los Cielos, entre otros, los cuales, asegura, le han brindado la posibilidad de aprender y crecer profesionalmente.

Actualmente participa en la serie de Telemundo sobre la vida de José José. El histrión da vida a Poncho, a quien ve como un reto y uno de sus personajes más importantes, pues como en la ficción, se considera un gran admirador del intérprete de “Amar y querer”.

En entrevista con EL UNIVERSAL Querétaro, el sinaloense habla sobre su papel en esta serie y su trayectoria como actor.

¿Cómo nació tu pasión por la actuación?

—No sé muy bien cómo fue, nunca me inculcaron, ni me impusieron nada, incursioné en el momento en el que mi padre me preguntó si me hubiera gustado estudiar actuación. Un día fuimos al cine, terminó la película y estábamos impactados por las actuaciones de los actores y platicando me lo preguntó y me incitó a tomar talleres, creo que lo tomé demasiado en serio porque dejé de estudiar y me fui a la Ciudad de México para ser actor de tiempo completo.

¿Cuál es tu papel dentro de la serie José José el príncipe de la canción? 

—Interpreto a Poncho que trabaja en un café y está enamorado de Nora, la fan número uno del artista (José José), que es quien lleva al club de fans y que también llegó a organizar entrevistas, estoy sobre todo  en la primera etapa de la serie, en los años 70; la historia se divide en cuatro décadas. Estoy muy contento de participar en esta serie, ya que soy gran admirador del Príncipe de la canción y todo papel es un logro más en mi carrera.

¿Qué significa para ti estar en continua evolución al ser parte de distintos proyectos? 

—Estoy muy agradecido, me siento afortunado, es un buen camino y proceso el que he llevado, creo que me he tomado mi tiempo para elegir los proyectos y saber aprovechar mi espacio; estoy contento porque he ido escalando y poco a poco estar dentro de este ámbito, que me hace feliz.

Has participado en cine, teatro y televisión, ¿cuál de estas plataformas es la que más te motiva? 

—Son totalmente diferentes, el teatro es muy vivencial, no hay como vivir y estar en un escenario y sentir la energía en el público, ese nervio que te da, elegir no sé, pero en esta parte de mi vida me gustaría más estar haciendo televisión o cine.

¿Cuál consideras que es el papel más significativo que has desempeñado? 

—Cada papel es importante, todos exigen retos, tuve un personaje en teatro que me exigió mucho, pero no sé si es el más importante, cada cabeza es un mundo, pero para mí la prioridad es el crecimiento actoral que tenemos con cada uno de ellos.

¿Cuál es el camino por el que quieres que vaya tu carrera? 

—Me gustaría que se fuera por un rumbo que me ayudara a ser reconocido por la diversidad de personajes, que fuera multifacético y con muchos matices, no quisiera caer en el cliché, en cierto punto de mi vida me encantaría tener reconocimiento  por ser  camaleónico.

¿Te gustaría incursionar como productor o director? 

—Me encantaría dirigir teatro y cinematografía, sería un sueño para mí.

¿Hay algún límite que tengas como actor? 

—Hasta ahora no he encontrado alguno, pensé que los tenía, pero creo que apenas los estoy experimentado; una ocasión estuve desnudo y no sólo fue eso, sino la temática de la obra también era fuerte, antes creía que no lo haría y lo hice, y me siento orgulloso.

¿Cuáles son los planes que tienes por ahora?

—Estoy retomando talleres de actuación, de improvisación, clases de escena, audición para crear una mayor seguridad en nosotros, creo que la  actuación  es como un músculo que tiene que estar en constante práctica.

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