Era el último día de la Feria de El Marqués. El recinto establecido en la comunidad de La Griega se llenó de visitantes emocionados que querían pasar un día musical, además de comer algodones de azúcar, los antojitos y disfrutar de la emoción al subirse a los juegos mecánicos.
Cayó la noche y era momento de disfrutar el show musical. Los marquesinos y visitantes de otros puntos del estado atestiguaron la presentación de una agrupación estrella con aproximadamente 40 años dentro del género del sonidero mexicano.
“De Iztapalapa, para el Marqués”, fue la frase con la que el público coronó a gritos la visita de Los Ángeles Azules, quienes ofrecieron un concierto de más de una hora y media en la que interpretaron piezas como “Cumbia del acordeón”, “Amor de amores”, “Juventud” y “Cumbia picosa”.
Al inicio, algunos asistentes parecían estar tímidos, pues gozaban del sonido de los instrumentos moviendo sólo un poco los pies. Conforme transcurría el tiempo, la cadencia era más evidente y el cuerpo se notaba más suelto, además de qué el público levantaba las manos, aplaudía y de repente no faltaron unos que otros pasos “guapachosos”, directo del barrio.
Júbilo y alegría en el ambiente. No había ni una sola persona estática, pues todos tomaron a sus parejas y bailaron al son del acordeón.
La música de los Ángeles Azules se caracteriza por no tener un límite de edades entre sus seguidores, ya que sorprendentemente niños y jóvenes coreaban cada una de las canciones como si hubieran sido éxitos de su época.
Alegrando aún más la velada, Roberto, primera voz del grupo, invitó a algunos de los asistentes a subir al escenario para vivir en carne propia la emoción de sentir toda la energía que el público emana. Siete participantes mostraron sus mejores pasos de baile sin ninguna vergüenza frente a los miles de fanáticos que, debajo del escenario, no querían quedarse atrás y también se movían al son de las melodías.
Posteriormente, cuando parecía que la noche no se podía poner mejor, se escuchó la introducción de “Sentimientos”, canción que fue lanzada nuevamente en el 2014 con la colaboración de Ximena Sariñana dentro de su disco De plaza en plaza.
“Querétaro bonito, municipio El Marqués, gracias por tanto cariño. Si es que aún queda alguien sentado aplauda o parase que esto se hizo para bailar”, expresó el vocalista principal de la agrupación para después continuar con el recital “cumbianchero”.
Los 16 integrantes lucieron uniformados con sus ya tradicionales trajes azules y las chicas destacaron con vestidos negros que brillaban con las luces del escenario.
Al finalizar, las sonrisas de los fanáticos demostraron que la noche fue todo un éxito, al salir jubilosos por haber escuchado sus canciones favoritas como “Mi niña mujer”, “Juventud”, “17 años”, “Las maravillas de la vida”, “Cumbia del infinito”, entre muchas otras.