Todos los martes y jueves Jorge Ortiz de Pinedo, su esposa y un hijo, se sientan frente a la televisión para reírse con los programas de comedia en televisión abierta.
“Y entonces te ríes con otros y no sólo tú solo, que es cuando se te quedan viendo como loco”, dice.
Por ello, el actor celebra la barra de comedia dominical que lanzó Televisa inicialmente con Vecinos, dos programas por día y que él continuará a partir de junio con las dos nuevas temporadas de Una familia de diez.
“Pedía un horario más familiar para que la gente pueda reunirse y divertirse. Hay quien puede pagar streaming y está bien, pero veamos que si hay 130 millones de personas (en México), hay 60 que ven tele abierta.
“Ahí tratan de satisfacer la necesidad de toda una familia y por eso hay noticieros, deportes, programas de concurso, comedia y creo le hacía falta reírnos en grupo”, puntualiza el también productor.
Una familia de diez, en su nueva faceta, tendrá 26 episodios en televisión.
Esta etapa contará con el elenco original encabezado por el propio Ortiz de Pinedo y contará con Eduardo Manzano, Andrea Torre, Mariana Botas, Daniela Luján, Ricardo Margaleff, Zully Keith, María Fernanda García, Jessica Segura y Moisés Iván Mora, además de dos niños.
“Ya hicimos la segunda que estuvo 10 años en el candelero a ver si se hacía o no y la tercera entramos en dos semanas a grabarla”, apunta.
Para fines de año espera comenzar gira por EU con la versión en teatro de la serie.
Y el López Tarso. “Lo único que querían era quedarse con unas butacas, ahora el chiste es que las usen”, exclama Jorge Ortiz de Pinedo sobre el teatro Ignacio López Tarso, en la Ciudad de México.
A lo largo de seis años montó diversas obras en el inmueble hasta que, en enero, la alcaldía de Álvaro Obregón le pidió abandonarlo.
En el mismo había invertido ocho millones de pesos y cuando llegó el momento, se llevó lo que era de su propiedad, como el sonido.
Su última puesta fue Atracción fatal con Itatí Cantoral. Desde entonces luce vacío.
“Cuesta mucho trabajo abrir un teatro y ponerlo a funcionar y ese había logrado posicionamiento en el teatro mexicano; es una tristeza pero bueno, creo que ya todo mundo se dio cuenta o espero se haya dado cuenta que lo único que querían era quedarse con unas butacas”, dice respecto a la separación, que responde a un programa de recuperación de espacios públicos del nuevo gobierno.
Atracción fatal la tiene guardada sin descartar que sea una de las cinco obras que reponga en 2020 para celebrar 12 años de la productora.