Equinoterapia. Caballos, cómplices ideales para sanar
Cecilia Quezada López acomoda la montura de Tomasa, una de las yeguas con las que trabaja la equinoterapia en el Centro de Rehabilitación Integral Ecuestre (CRIE). Toma de la mano a Giancarlo y lo sube para hacer unos breves ejercicios.
La actividad permite reducir el tiempo de rehabilitación de pacientes con discapacidades
Cuando inició en esta labor, hace 15 años, Cecilia trabajó de forma escueta con la policía montada de la Ciudad de México, que en aquel tiempo eran los únicos dedicados a proporcionar este tipo de terapia.
Redacción
Después se mudó a Querétaro y comenzó a trabajar en el municipio de El Marqués, posteriormente pudo instalar el centro de rehabilitación en las inmediaciones de Huimilpan, a un costado de la carretera estatal 411.
Redacción
De acuerdo con Cecilia, el trabajo con el caballo permite a pacientes que tienen discapacidad mental, física, neurológica o psicopedagógica, a recortar los tiempos en rehabilitación.
Redacción
Uno de los factores que influye es que cuando el paciente sube al caballo, se ejercen movimientos tridimensionales, con los que se mandan señales al cerebro para reactivar neuronas que son sensibles al movimiento.
Redacción
Otro factor es el calor que genera el caballo, debido a que el animal posee una temperatura corporal de 38 grados centígrados; al momento de realizar los ejercicios terapéuticos, el calor funge como una especie de analgésico, que logra reducir el dolor en los pacientes.
Redacción
Cecilia plantea que cada caso que llega al centro de rehabilitación es distinto, por lo que siempre adaptan la metodología de trabajo de acuerdo al paciente y a su padecimiento. En promedio, atienden poco más de 50 niños de forma mensual, cada uno con las necesidades requeridas.
Redacción
Cecilia platica que el caballo exige lo mejor de cada una de las personas que se suben a él, pues hay una reciprocidad porque ayudan a mejorar. El caballo, al ser un animal depredado, ha desarrollado diversos mecanismos para sobrevivir; por ello, las personas que trabajan en la equinoterapia deben ir lo más tranquilas posible, ya que estar con una carga emocional fuerte, impide el trabajo con los animales.
Redacción
El reto que tiene la equinoterapia, de acuerdo con Cecilia Quezada, es lograr integrar este tipo de metodologías en la salud pública gratuita. Se requiere que los equinoterapeutas documenten los casos de forma científica para que se tome en cuenta como servicios de salud y haya mayor apertura en las instancias públicas.