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Comunidades de San Juan del Río registran un incremento en el consumo de drogas, como la llamada cristal, entre su población joven, indicó la presidenta del Colegio de Psicólogos, Tania Ávila Lovato, quien atribuyó el hecho a que la sustancia es popular entre población migrante que incita este hábito en sus localidades de origen.
A través de su espacio de la Juventud, el Colegio de Psicólogos atiende mensualmente hasta 10 casos de jóvenes que refieren ser consumidores de alguna droga.
Tania Ávila aseguró que mientras en la cabecera prevalece el consumo de alcohol, tabaco y marihuana, es en comunidades rurales donde mayormente ha incrementado el uso de sustancias sintéticas, como la metanfetamina.
El Colegio de Psicólogos ofrece pláticas de orientación en instituciones educativas de comunidades; ahí los jóvenes confiesan haber probado el cristal por ofrecimiento de habitantes que radican en Estados Unidos o al norte del país.
“Desafortunadamente la popularidad de esta droga está relacionada con esta situación de migración, algunas personas que van hacia el norte influyen en el consumo entre los jóvenes que radican en San Juan del Río cuando regresan a sus comunidades de origen”, mencionó la presidenta del instituto de psicología.
Además del cristal, en zonas rurales ha incrementado también el consumo de “piedra” o crack, un derivado de la cocaína, revelaron algunos jóvenes orientados por el Colegio de Psicólogos.
Recientemente, el Colegio de Psicólogos atendió el caso de un niño de 10 años, originario de una zona rural, que reconoció haber consumido cristal.
Ávila advirtió que cada vez es menor la edad en que los sanjuanenses prueban sustancias prohibidas; calificó como alarmante que ingieran sustancias más peligrosas y altamente adictivas.
El consumo de cristal ya ha sido denunciado por autoridades auxiliares de comunidades como Arcila y la Estancia.
