Trece nuevas unidades de transporte público entraron en funcionamiento ayer y se suman a la flotilla de Red Q para incrementar la frecuencia del servicio.
Jorge López Portillo Tostado, secretario de gobierno, informó que se beneficia de forma específica a cinco rutas que estaban rebasadas por la demanda de los usuarios, luego de la reingeniería de trayectos para la zona metropolitana.
“A las seis de la mañana dimos el banderazo de salida a 13 unidades nuevas de la Sociedad Anónima Taxibuses en el patio de encierro; son 13 unidades perfectamente equipadas, pintadas, con asientos especiales para las personas con discapacidad”.
Dichas unidades de transporte público se suman a las 12 que ya habían sido lanzadas y se prevé que la siguiente semana 10 vehículos más se incorporen a las labores de servicio de pasajeros, para así llegar a 35 nuevos camiones de dicha empresa.
Cinco rutas beneficiadas
Las unidades salieron directamente a los puntos de ruta para incorporarse al trabajo, con lo que se benefician las rutas: 98, 12, 121, 21 y la 9. Hay que recordar, señalaron el Red Q, que la ruta número 7 fue prácticamente cubierta con los 12 vehículos que se liberaron la semana antepasada”.
La intención con el proyecto Red Q, agregó el funcionario, es que los empresarios hagan el esfuerzo para adquirir estas unidades a fin de mejorar la calidad del servicio; habrá, en total, 75 nuevas unidades en los siguientes 15 a 20 días, vehículos que funcionan con diésel y otras con gas natural.
Las nuevas unidades implican una inversión superior a los 30 millones de pesos. En el evento celebrado en el patio y talleres de dicha empresa, el secretario reconoció el esfuerzo de los concesionarios.
“Esta es una muestra de que se solidariza Red Q incorporando nuevas unidades a las rutas con mayor demanda de servicio”.
Una de las principales quejas de la ciudadanía debido al ingreso del sistema Red Q, es el cambio de rutas, las que —en ciertas horas del día— están saturadas y los choferes ya no les brindan el servicio.
Eso ha ocasionado problemas laborales y escolares, en el caso de los alumnos de educación media superior y superior, por lo que la demanda es que haya más frecuencia de autobuses y que también se extienda el horario de servicio, ya que hay rutas que ya no pasan por ciertas calles o colonias después de las nueve de la noche.
A las quejas ciudadanas sobre la operatividad logística, se suma el hecho de que algunos lectores de tarjeta están descompuestos y al usuario se le obliga a pagar en efectivo pese a tener el plástico, de manera que no se respeta la gratuidad del servicio cuando los aparatos no sirven.