Más Información
El secretario de Desarrollo Social municipal, Erik Osornio Medina, anunció que en los nueve meses que restan a la administración local se estará ampliando el apoyo al programa de huertos comunitarios que el municipio de Querétaro desarrolla en conjunto con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), y con el que se beneficia a más de 100 familias.
Hasta el momento, en lo que va de la implementación de este programa y en los propios huertos se han invertido poco menos de 900 mil pesos, apoyo que se ha destinado principalmente a capacitación, asistencia y acompañamiento del sembrado, además de plantación y trasplante, hasta que las familias que realizan la producción obtienen la hortaliza.
De acuerdo con el funcionario municipal, mediante el impulso a este proyecto se han obtenido buenos resultados, toda vez que las familias que participan en él se muestran interesados en participar porque observan un beneficio para ellas.
“Las familias se interesan y aportan para poder obtener un beneficio directo a su economía y nutrición”, dijo el funcionario.
De igual manera, Osornio Medina señaló que el propio alcalde ha señalado los beneficios que se tienen con el programa, además de indicar que es necesario continuar con el impulso a este tipo de actividades fundamentales. “El presidente Roberto Loyola nos ha instruido a que debemos mejorar las condiciones de vida de los queretanos y brindarles las herramientas necesarias”, dijo el secretario.
Los polígonos beneficiados hasta el momento son el Cimatario, San José El Alto y Menchaca II. En cada uno de ellos se cuenta con 30 familias que tienen un huerto propio y dos huertos comunitarios, y que son asesoradas por un biólogo especializado en el tema.
El titular de la Sedesol municipal explicó que estas zonas componen la primera etapa del proyecto: “Es un programa que se lleva a cabo de forma inicial en tres polígonos, vemos cómo las familias de forma conjunta cuidan estos huertos y de ahí mismo obtienen productos para su mesa, lo que representa un ahorro y también contribuye a una alimentación más adecuada”.
A las familias beneficiarias se les otorgan todos los artefactos necesarios, como palas, rastrillos, azadones, bieldos y semillas de polinización abierta, así como semilleros, malasombra y soportes para techumbre, fertilizantes e insecticidas biológicos, con los cuales se promueve la obtención de una cosecha planeada.
Acelgas, espinacas, cilantro, ejote, tomate y calabaza son algunos de los productos cosechados en el tiempo que lleva el proyecto, mismo que concluyó el 31 de diciembre, pero que se buscará que continúe y llevarlo a más polígonos, comentó Osornio.
