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La Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia (Prodemefa) en San Juan del Río detectó un incremento de agresiones físicas entre menores de edad, de acuerdo con el titular de la dependencia, Arturo Campista, quien dijo que esta situación se presenta incluso en los primeros años escolares.
En lo que va del año se han reportado cinco casos de bullying a la Prodefema, en dos de estas situaciones los menores incurrieron en agresiones físicas en contra de compañeros de su escuela.
“En uno de estos casos un niño agredió a su compañero con un palo, estas son conductas preocupantes y ya tenemos que intervenir para contrarrestarlo, en otros casos predominan agresiones verbales pero ha sido tanto el daño que causa que hemos tenido que proporcionarles tratamientos psicológicos”, dijo Arturo Campista.
Explicó que contrario a lo que se puede suponer, los niños agredidos presentan conductas normales y su interacción con los compañeros de aula es positiva; son pocos los casos de menores introvertidos y que por esta actitud sean víctimas de hostigamiento.
Sin embargo, se detectó en los niños agresores conductas antisociales derivadas de problemas en el entorno familiar, siendo necesario para ellos una mayor atención psicológica, que se brinda en dicha procuraduría y del especialistas del DIF Municipal.
“Los niños que agreden regularmente han sido agredidos por familiares o tienen problemas en sus hogares, son conductas que se ven reflejadas en las aulas”, añadió el funcionario.
Reconoció que los casos de hostigamiento escolar en niños de más corta edad ponen en alerta a las autoridades del DIF, razón por la que se pondrán en marcha sesiones de la Escuela para Padres a fin de orientar a las familias sobre las consecuencias de estas conductas en los infantes.
Alumnos de primaria, más vulnerables
A decir de Arturo Campista, los estudiantes de nivel secundaria y bachillerato que pueden ser víctimas de bullying superan con mayor facilidad las afecciones psicológicas que causa en ellos este tipo de hostigamiento;sin embargo, ésto no sucede con los menores de nivel primaria, que pueden arrastrar con traumas durante un largo periodo de su vida escolar e incluso modificar negativamente su conducta e interacción social.
Para 2013 se denunciaron 22 casos de bullying entre estudiantes de nivel secundaria; en dicho año no se reportaron hostigamientos escolares entre alumnos de escuelas primarias; no obstante, el procurador insistió en que las agresiones escolares afectan cada vez más a niños de corta edad.
Sobre los casos reportados este año, tres ocurrieron en escuelas de comunidades y el resto en instituciones de la cabecera municipal; las instituciones en las que se ha detectado bullying coinciden en contar con grupos escolares de un promedio de 60 alumnos.
