Hace 15 años, María Josefa Videles González, mejor conocida como la Tía Jose, fundó la Casa Hogar “Unidos con Jesús” que inició por la necesidad de hacer algo por niños en situación de calle o violentados en sus hogares.
En este tiempo ha atendido a 170 niños y adolescentes, a quienes se les brinda techo, comida, ropa y educación; todo ello con apoyo de la sociedad civil, hace 12 años se constituyó como una asociación civil lo que ha abonado a tener mayor respaldo de la sociedad en Querétaro.
La misión, según describe la Tía Jose es proporcionar un hogar y familia unidad a los niños “que les brinde amor, confort, así como educación, valores, principios éticos y morales, procurando darles lo que necesitan para convertirlos en hombres trabajadores, padres responsables y ciudadanos ejemplares”.
Por generaciones ha sido la única figura, junto con sus colaboradoras, de autoridad y amor, cercana a unos padres, para los 170 niños que han pasado por este hogar.
Platica que ha sido difícil mantener en pie la casa, debido a los recursos económicos que se requieren para darles a los niños todo lo que necesitan; seguimos de pie, gracias la gente buena.
“Le digo a los niños que la unión hace la fuerza y es lo que hemos hecho nosotros para lograrlo, tal vez mi labor es muy pesada pero les he dicho a todos que si estoy aquí es porque existe la gente buena, si no hubiera gente buena con estos corazones grandes no sería posible lo que tenemos”, señaló.
Han sido muchos los obstáculos y resulta una labor “titánica” que cuando inicio en 1998 la gente que la conocía le decía que no iba a poder, sin embargo, las ganas de ayudar y el amor de los niños han sido el principal motor de este trabajo.