De acuerdo con el secretario de Gobierno en el municipio de Querétaro, Mauricio Ortiz Proal, los inspectores sólo han tenido conflictos verbales con los ambulantes del Centro Histórico, ya que no se quieren quitarse cuando se les pide, pero en ningún momento se han registrado agresiones.
“Necesitamos todos tener una mayor colaboración y una mejor disposición para que cuándo un inspector se acerque con un compañero que realice esta actividad (comercio en vía pública) sin el permiso correspondiente y lo conmine a retirarse… pueda recibir una respuesta favorable porque lamentablemente… cuándo se tiene que obligar a alguien a que desaloje un espacio efectivamente se dan condiciones que a nadie de nosotros nos gustan”.
Apenas la semana pasada integrantes del Frente Estatal de Lucha se manifestaron afuera de Palacio de Gobierno para demandar que se les dejará vender en el centro, sin embargo cuando llegaron los inspectores a retirarles sus pancartas y una casa de campaña, al parecer una mujer embarazada fue agredida por uno de los trabajadores municipales.
Ortiz Proal, resaltó que las autoridades seguirán de cerca el tema, luego de que se les informó que fue interpuesta por los comerciantes ambulantes una queja en la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en contra de los inspectores del municipio capitalino.
Manifestó que de haber pruebas convincentes de la agresión se tendrá que reconvenir a los involucrados y si se procede a una sanción, se tendrá que actuar con forme lo marca la ley; sin embargo, reiteró que se tendrá también que generar la consciencia para que cuando se les invite a retirarse de un espacio lo hagan con una respuesta positiva.
El pasado martes Alicia Hernández, la comerciante que denunció haber sido agredida por Óscar Orozco, inspector del municipio de Querétaro, reveló haber recibido amenazas de funcionarios municipales e hizo responsables a las autoridades en caso de sufrir alguna complicación en su salud o la de su bebé, pues tiene siete meses de embarazo.
