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Cerca de dos mil serranos acudieron al panteón municipal de Jalpan de Serra, para recordar a “sus fieles difuntos”. La celebración eucarística fue encabezada por el párroco, Fidencio Servín, quien en su homilía, solicitó pedir por todos aquellos que ya descansan, “nuestros hermanos, se fueron y hay que pedir la intersección de nuestra madre María, para que vivan en paz y logren la salvación eterna”, refirió el sacerdote de la localidad.
Fidencio Servín también dijo que la reconciliación entre familias debe de prevalecer, “la fe en Dios nuestro señor nos debe de servir para lograr la fraternidad y el amor en nuestros seres queridos. La esperanza de una vida mejor se debe de lograr con nuestras buenas obras en vida”, aseguró el presidente del decanato de la sierra.
De esta manera, habitantes del norte de Querétaro acudieron a conmemorar a sus difuntos, muchos de ellos sólo una vez al año visitan el panteón municipal y se dan tiempo para arreglar la tumba de sus familiares.
“Mi padre se fue hace 7 años, me fui a trabajar a Vallarta, y por lo menos en estas fechas vengo con mis hermanos, nos unimos y escuchamos misa”, aseguró el visitante Roberto Martínez.
Los hermanos de la Cruz se dedican al canto tradicional, en los últimos cuatros días no han dormido, el aguardiente ha sido su mejor compañero, el minhuete lo cobran a 100 pesos. Son de los pocos que se dedican a este arte, “no hemos descansado nada, la gente nos pide una composición y le improvisamos, este año nos ha ido bien, aquí estamos para cantarle a la muerte y a la vida, al recuerdo y al olvido”, manifiesta el cantautor Reynaldo Cruz.
Las flores de cempasúchil se acabaron muy temprano, los vendedores reportan que hubo mal cultivo, “llovió mucho este año, lo que provocó que las flores se perdieran, por esta vez tuve que dedicarme a vender otras flores, ya que la amarilla no pego en la siembra, ya que el campesino después de cultivar el maíz en la siembra en sus tierras”, dijo Teresa Orduña, vendedora.
Suena la música, el llanto de la gente, se abrazan, recuerdan al ser querido, los cohetes son incansables, las tumbas llenas de flores, los rezos no cesan, las imágenes de la Virgen de Guadalupe ocupan cada espacio en este lugar.