Los constructores afiliados a la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) del estado reportan que sufren de constantes robos donde las pérdidas son superiores a los 600 mil pesos, aseguró su presidente, Alejandro Cabrera Sigler.
Las principales zonas en las que se presentan estos ilícitos son las vialidades y carreteras principales, en las que las obras quedan completamente desiertas durante la noche, y escape se facilita.
Las obras localizadas en las carreteras estatales, principalmente la libre a Celaya y la de San Luis Potosí, son especialmente vulnerables; ahí, los ladrones sustraen las herramientas de mano motorizadas además del material metálico que se vende entre las compañías de reciclaje de materiales.
“Yo pienso que una vez al mes tenemos un robo, llega gente en la noche, en la madrugada e intentan meterse a las obras, (…) algunos lo logran, amagan al velador y se llevan cobre, cables, y las cosas de más valor: herramienta ligera, compactadoras, soldadora”, explicó.
En cada uno de los robos de los que son víctimas los constructores afiliados a la cámara de la construcción el daño es estimado en los 600 mil pesos, y aunque en ocasiones es mucho mayor, las compañías aseguradoras apoyan a los constructores, que ante estas situaciones, tan sólo tienen que pagar el deducible de impuestos.
En materia de robo de maquinaria, en lo que va de este año, los constructores afiliados a la cámara de la construcción no han sufrido robos, pero continúan trabajando con el propósito de evitar que se lleguen a presentar estos por medio del sistema Remaqro con el que mantienen el control de todas las unidades.
“Hemos estado colaborando con las autoridades por medio del sistema Remaqro que es un sistema interno de protección y prevención para contrarrestar el robo de maquinaria, donde trabajamos de la mano con todas las autoridades que tienen que ver con la detección de esta maquinaria tanto de carácter municipal, estatal y federal”, confirmó Cabrera Sigler.
Los integrantes del consejo de la CMIC se han puesto en contacto con las autoridades municipales para terminar con los robos o al menos reducir la incidencia, los integrantes de la policía municipal de Querétaro han aumentado los patrullajes en las diferentes zonas de construcción y los constructores han puesto un mayor número de vigilantes nocturnos en las obras.