Entre las 9:30 a 10:00 de la mañana, Elías Robles se instala en esta temporada en distintos puntos del Jardín Zenea en el Centro Histórico, y es uno de los globeros que llegan a vender su mercancía en la que los niños harán llegar su carta a los Reyes Magos.
Elías tiene casi cinco años en este negocio, porque esta época del año es la mejor para ellos, sobre todo por las tardes, que es cuando hay mayor afluencia de gente en el centro. Este año espera superar la venta que registró en 2012.
“Por la tarde es cuando hay mayor afluencia de personas, espero llegar a vender más de 10 mil globos que fue lo que vendí el año pasado, aunque también llega mucha gente de fuera a vender, son del mercado informal y hay más competencia”, asentó Elías.
Vende sus globos a 15 pesos el chico y a 30 pesos el grande. Para él no son globos cualquiera, ya que llevan un proceso especial: una vez inflados los barnizan para que duren más tiempo.
“Estos globos duran mucho, porque los barnizamos para que aguanten más y se vean mejor, todo es un gasto porque también en el helio se gasta mil 300 en el tanque, pero sí le ganamos bien, ahora sí que le recuperamos”, sostuvo.
Mariela Calderón también vende globos, desde hace 20 años se instala en el Jardín Zenea, y recuerda que años atrás les iba mucho mejor.
Comenta que ella también barniza los globos. Explica que es una protección para que no se rompa y no se opaque, de esta manera quien compre un globo tendrá la seguridad que le durará en buen estado 3 días.
Debido al mercado informal de temporada, comenta Mariela Calderón, sus ventas han disminuido en relación con 10 años atrás.
“Antes se vendía más, eran unas ventas buenísimas, porque por persona acabábamos unos 400 a 500 globos y ahorita si acabamos unos 150 ya es mucho, en estos días de 3, 4 y 5; pero el 5 es el día más fuerte”, abundó.
Comentó que tres días previos al Día de Reyes el movimiento es más tranquilo, porque se comercian entre 100 a 150 globos por día, y el 5 de enero vende entre 250 a 300 globos.
Ella también cuenta con variedad de tamaños, aunque en los días anteriores al 5 sólo vendía de los pequeños de 15 pesos, pero el día fuerte lleva de dos tamaños, y el grande lo ofrece en 25 a 30 pesos.
Dijo que si ha tenido varias anécdotas, como cuando un niño llega llorando, porque su globo se tronó porque lo compraron con la gente que vende afuera del Centro Histórico.
Detalló que hay familias que ya la conocen y año con año la buscan para comprar sus globos. “La gente que ya nos conoce de años, que nos han comprado pues regresan y regresan, ya tenemos a nuestros propios clientes”, puntualizó.