Una tormenta helada y fuertes vientos se registraron en la comunidad San Gaspar, municipio de Pinal de Amoles, ubicado en la Sierra Gorda de Querétaro.
El director de Protección Civil, Óscar Mejía Pérez, informó que es la primera helada del año, pues la temperatura mínima fue de 0° centígrados.
Asimismo, las autoridades exhortaron a los automovilistas a no viajar debido a lo resbaloso de los caminos, aunque señalaron que no se registraron afectaciones en las viviendas.
“Seguimos en constante comunicación con la Unidad de Protección Civil, así como con la Secretaría de Salud, el mismo personal de la presidencia municipal está en la disposición de auxiliar ante cualquier posibilidad meteorológica”, aseguró el funcionario.
Informó que las comunidades más vulnerables en Pinal de Amoles se ubican a dos mil metros sobre el nivel del mar. Algunas de ellas son San Gaspar, Mastranto, Cuatro Palos, Rancho Nuevo y La Cañada, en las cuales habitan ocho mil personas.
Informó que para evitar cualquier contingencia informó que está en funcionamiento un albergue invernal.
“Tenemos un albergue fijo ubicado en el Centro de Día, así como los auditorios de Ahuacatlán de Guadalupe y el auditorio de la cabecera municipal. También Protección Civil del estado nos da aviso de los frentes fríos y se mantiene constante monitoreo vía radar en conjunto con la Comisión Estatal de Aguas (CEA)”, mencionó el director. Destacó que la utilización de tecnologías y el Internet facilitan la comunicación tanto gubernamental como ciudadana, además de la telefonía y la radiocomunicación.
“En este sentido se ha renovado el equipo, ya que contamos con radiocomunicación digital que opera actualmente y facilita el trabajo. La red de Internet es ocupada para ver el estado del tiempo real”, dijo.
El director de Protección Civil recalcó la existencia de un plan contra las contingencias, el cual fue estructurado por las dependencias estatales.
Destacó que durante los días siguientes se trabajará en el monitoreo de las comunidades más vulnerables al frío.
“Hay trabajos fuertes en este sentido, tanto en el uso de la tecnología, como al personal asignado, cubriendo guardias constantes, acudiendo a las comunidades con mayor susceptibilidad de daño, ya que se encuentran lejanas e incluso en ocasiones anteriores, quedan incomunicadas”, concluyó.