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La creación de un nuevo modelo de Policía Estatal Única, no es la solución a los problemas de seguridad que tiene el país, consideró Alejandro Fontecilla Pinto, analista independiente en temas de seguridad, quien actualmente se desempeña como consultor para el Instituto para la Seguridad y la Democracia (Insyde), donde se especializa en reforma policial y e implementación del nuevo sistema penal acusatorio.
“Crear policías únicas nacionales o estatales, hay evidencias a nivel internacional de que no es la respuesta. Tenemos países como Estados Unidos, que tienen más de 4 mil policías y su operación es un ejemplo a nivel mundial y tenemos policías únicas nacionales como en el caso de Guatemala, que son de las peores policías calificadas a nivel internacional”.
Dijo que la propuesta de cambiar el modelo policial en el país surgió en el sexenio del ex presidente Felipe Calderón, y que ha sido retomada por Enrique Peña Nieto, la cual consiste en desaparecer a los cuerpos de Policía Municipal y crear una cuerpo de Policía Estatal Único, que dependa del gobernador estatal, quien tendría la responsabilidad de garantizar la operación policial en los municipios.
“Esto significa pasar todos los recursos al gobernador, es decir, que el gobierno del estado administre todo el tema policial a nivel entidad”.
Explicó que con el modelo actual, las corporaciones policiales del estado y municipales reciben recursos federales a través de distintos programas gubernamentales, como el Subsemun (Subsidio Para la Seguridad Pública de los Municipios), el cual, en caso de que se aprobara la reforma constitucional, esos recursos llegarían directamente al gobierno estatal y no al municipal.
Señaló que algunas de las ventajas que tendría el modelo policial que propone el gobierno federal es que facilitarían la administración y la organización de un solo cuerpo policial a nivel estatal y por ende, se podría impulsar una sola política que incluya capacitación y la homologación salarial.
“Para temas de administración o para implementar una sola política, sería más fácil organizarte. Lo que podría suceder es que al fusionar a 18 policías municipales, en el caso de Querétaro, con la Policía Estatal, la administración sería más sencilla, como la implementación del servicio de carrera policial y la homologación de salarios”.
Sin embargo, Fontecilla Pinto también criticó la propuesta y reiteró que esta posible reorganización no representaría la solución a los problemas estructurales y de fondo de la policía en México, ya que podría verse afectada, entre otras situaciones, por intereses políticos.