Como EL UNIVERSAL Querétaro lo dio a conocer el pasado 18 de febrero, migrantes centroamericanos revelaron el secuestro de ocho mujeres en la comunidad de San Nicolás, en el municipio de Tequisquiapan.
De acuerdo con el testigo del hecho —que aseguró haber escapado del intento de secuestro— una noche a principios de 2013, varios sujetos llegaron a la zona en una camioneta tipo pick up, sin placas y obligaron a ocho mujeres a subir al vehículo, llevándoselas sin dar explicación alguna.
Por su parte, el centroamericano huyó del lugar para refugiarse en la Casa del Migrante González y Martínez, presidida por el sacerdote Mario González Melchor, quien presentó la denuncia correspondiente a las autoridades.
El testigo señaló que acompañaba a una mujer de Honduras, por lo que se estima que la mayor parte de ellas podrían ser de ese país y no mayores de 25 años.
Sin embargo, pese a la denuncia levantada por el hecho, hasta el momento las autoridades no han podido dar con el paradero de las ocho migrantes desaparecidas, lamentó el sacerdote.
“Nos denunciaron un presunto secuestro de ocho muchachas en la comunidad de San Nicolás, en una camioneta se las llevaron”, externó el religioso.
Los migrantes presumen que se trata de redes criminales, aunque González Melchor dijo que no hay certeza de ello debido a que los testigos temen denunciar estos hechos.
Afirmó que aunque pidió a los migrantes contribuir a la presentación de la denuncia en el Ministerio Público, ninguno de ellos quiso ser testigo en los hechos para evitar ser deportado.
“Desafortunadamente los migrantes temen denunciar, lo que quieren es huir de la delincuencia y no descartamos que hayan más casos de privaciones de libertad, pero ellos tienen terror”, dijo el sacerdote y presidente de la estancia del migrante.
González Melchor aseguró que son los adolescentes y las mujeres los más vulnerables a este tipo de ilícitos y advirtió el incremento de este sector de migrantes para este año debido a la crisis económica que se presenta en los países de Centroamérica.