En México, las estadísticas indican que 90% de los accidentes de tránsito son prevenibles, 60% está relacionado por el consumo de alcohol y 28% por exceso de velocidad; con la muerte de 15 personas por cada 100 accidentes.
Luis “El Chapulín” Díaz, piloto mexicano, ofreció una ponencia en la Universidad Anáhuac en donde se advirtió a los jóvenes de los peligros que existen cuando se conduce bajo los influjos del alcohol.
Primero, con la colaboración de personal de la Policía Estatal, Protección Civil del estado y el Centro Regulador de Urgencias Médicas (CRUM) se simuló un accidente automovilístico provocado por un conductor en estado de ebriedad y en donde murió uno de los tripulantes.
Posterior a esto se llevó a cabo la conferencia, con participaron de autoridades de la entidad como el director general de Protección Civil en el estado, Gerardo Quirarte Pérez, y la secretaría de la Juventud, Andrea Spinolo Prieto.
Por medio de la gira Salvemos Nuestra Vida del movimiento social Actuemos Mejor, una ciudad, un cambio es que se informó que cada año mueren —en promedio— 16 mil 599 personas, 860 mil 960 personas quedan con alguna con discapacidad, un millón 026 mil 779 lesionados.
Así también es primera causa de muerte en personas de 15 a 35 años, la segunda causa de discapacidad general, novena causa de muerte general, 94% de los siniestros sucede en zonas urbanas, 63.1% involucra a automóviles, 60% por consumo de alcohol y 28% por exceso de velocidad.
“Un accidente vial es un siniestro, porque un accidente como tal no lo podemos prevenir (…) desafortunadamente en México si seguimos como hasta ahorita van a haber muchos jóvenes como ustedes que no van a poder cumplir con sus sueños a causa de una epidemia: los accidentes”, señaló.
Medidas preventivas
Para evitar algún incidente, Salvemos Nuestras Vidas tiene cinco recomendaciones principales: el alcohol y el volante nunca se mezclan “no queremos que no se diviertan, pero tienen muchas opciones para que no les pase nada”.
“Los invitamos a ser responsables, a que se atrevan a decirle no a sus amigos, familiares que quieren manejan luego de haber bebido, porque en muchos accidentes mueren personas inocentes: no se suban con alguien que bebió o impidan que lo haga”, mencionó.
Una segunda recomendación es el uso del cinturón de seguridad (en México solo 2% lo usa cuando viaja en los asientos traseros, no exceder los límites de velocidad (pues están marcadores bajo estándares técnicos para reducir riesgos), evitar distractores (como el uso de teléfono celular) y en el caso de los motociclistas usar siempre el casco.