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Como parte de las revisiones a todas las casas de empeño en el estado de Querétaro, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) reportó que 6 de los 10 establecimientos verificados en este año fueron sancionados con sellos de suspensión, por incurrir en infracciones a la Ley Federal de Protección al Consumidor.
De acuerdo con Dalia Garrido Rubio, delegada de Profeco en la entidad, en dichos establecimientos se aplicaron sellos de suspensión temporales por presentar a los consumidores contratos que establecían términos y condiciones diferentes a las estipuladas por la procuraduría.
“Lo que se detectó es que [los establecimientos] tienen un convenio registrado ante Profeco, donde se estipula claramente los términos y condiciones, pero muchas veces trabajan con otro, entonces se revisa cuáles son los términos y condiciones con los que trabaja y que sean los mismos aprobados por Profeco; cuando no coinciden hay sellos de suspensión”, mencionó la funcionaria.
“Casi te puedo decir que todos los que se han impuesto sellos, es porque ellos registran un contrato de adhesión en Profeco y trabajan con otro. Al detectar eso, automáticamente se ponen sellos de suspensión y se hacen acreedores de una multa”, indicó, al señalar que la sanción económica más alta alcanzó los 150 mil pesos.
Garrido Rubio explicó que, a la par de los sellos de suspensión, se aplica una sanción económica que puede alcanzar los 180 mil pesos y varía de acuerdo con la reincidencia de la infracción, la inversión del negocio y su comportamiento como proveedor, entre otras condiciones.
Agregó que los establecimientos sancionados tienen 10 días para subsanar las irregularidades detectadas por la Profeco y continuar con la prestación de su servicio.
Comentó que otros motivos para aplicar sanciones a negocios encargados de préstamos económicos es la falta de un registro nacional de casas de empeño y que no estén los precios a la vista de los consumidores.
