La nueva sucursal de la línea alemana de zapatos de confort, Birkenstock, generó cuatro empleos directos y 30 indirectos de proveedores y contratistas, informó el directivo de esa firma, Pablo Rozada Pérez de Salazar.
Precisó que muchos proveedores son internacionales, pues varios de los insumos provienen de Alemania, pero los contratistas, —que son los que ayudaron a construir toda la parte de la tienda— son originarios de Querétaro, y son entre cinco y diez personas.
La tienda es de alrededor de 100 metros cuadrados y se invirtieron en ella más tres millones de pesos.
Sobre próximas aperturas, el directivo de dicha firma dijo que todavía no está un plan definido, sin embargo, actualmente tienen en total cuatro tiendas en México y mantendrán un plan más “agresivo” de crecimiento, donde pretenden llegar a 15 tiendas en los próximos diez años.
En cuanto a la producción, descartó algún día instalar una planta en México, puesto que parte del valor de la marca está en reconocerla como tal, como muy “pura” en su hechura alemana.
“No es tanto que se menosprecie o que no queramos hacer algo en México, sería espectacular, pero es parte del valor de la marca de esta manufactura”, señaló Pablo Rozada.
Detalló que en México han tenido programas de sustentabilidad y cuidado al medio ambiente, incluso participaron activamente en tres programas.
En uno colaboraron con la fundación de Pronatura, en otra con Forestemos México, donde hicieron una donación para plantación de árboles, una en el Estado de México y otra reforestación en el Cerro del Cubilete, en el estado de Guanajuato.
“Ésto se llevó a cabo con una visión de mantenimiento de esos árboles a cinco años, a nivel de un par de hectáreas, lo cual implica 10 mil árboles”.
La firma de zapatos de confort tiene un Centro de Reparación Birkenstock (CRB), que trata de que todos los usuarios puedan llegar con sus productos y lo primero que se desgasta es la suela o la plantilla.
Para ello brindan un catálogo de reparaciones, donde el cliente puede ir directamente a la sucursal y obtener la reparación con insumos originales, además de que puede duplicar la vida útil de su propio calzado.
El costo promedio de un par de zapatos de esta línea es de mil 600 pesos y las reparaciones van desde 300 a 700 pesos.