Los jóvenes que prestan su servicio social muy pocas veces son contratados por las instituciones con las que colaboran, además que la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) ha tenido que cerrar tres programas, porque los estudiantes eran empleados en labores ajenas a su profesión y al objetivo del proyecto, aseguró Paulina Becerril Luna, coordinadora general de Servicio Social en la universidad.
Las principales instituciones que buscan el apoyo de prestadores de servicio son dependencias públicas de los tres órdenes de gobierno, por lo que las plazas a las que pueden aspirar son muy limitadas; de tal modo que aquellos estudiantes que llegan a estar por más tiempo son a quienes se les pagan por eventualidades o proyectos temporales.
En lo que respecta a la deserción de los estudiantes, Paulina Becerril comentó que son mínimos los casos en los que se presenta; sin embargo, explicó que la situación que se detecta con mayor frecuencia es que destinan más de un semestre en cumplir con las horas necesarias para liberar la materia de servicio social.
“La deserción es por una cuestión académica y es mínima, más bien como que amplían su estancia de servicio social, cumplen las 480 horas, pero en un tiempo mayor a lo que habían determinado, no se tiene tanta deserción porque además es curricular […] de los que se quedan también es muy reducido, porque en su mayoría son dependencias de gobierno y son muy pocas las plazas que ofertan, pero ganan muchísima experiencia laboral”, señaló.
Aunque no se han podido erradicar los programas donde a los jóvenes “los mandan a sacar copias o archivar”, se ha tenido mayor acercamiento para explicarles cuáles son los proyectos en los que los universitarios pueden colaborar por la capacitación profesional con la que cuentan. En este sentido, destacó el beneficio que tienen los eventos como la Feria Anual de Servicio Social, organizada por la UAQ.
Este año la feria se realizará el 10 de agosto en la explanada de rectoría de la UAQ, participarán 70 instituciones y se espera colocar a mil 700 universitarios que se encuentran en posibilidades de liberar su servicio social.
“Estaban acostumbrados a pedir contadores y abogados para funciones administrativas, ahora les decimos que tenemos Gastronomía, Desarrollo Humano para la Sustentabilidad, Estudios Socio Territoriales, hay otras carreras de las que pueden echar mano […], estos eventos los hacen más conscientes de que tienen que aprovechar el talento de nuestros alumnos”, refirió.
Paulina Luna apuntó que una vez que han cubierto al menos 70% de sus programas de estudio, los jóvenes deben hacer este servicio, el cual no tiene remuneración; para ello pueden incorporarse a las actividades de instituciones de los tres órdenes de gobierno y e organizaciones civiles.
Laura Lozano Dávila, de la Facultad de Contaduría y Administración, aseguró que de acuerdo con experiencias pasadas, la feria es una oportunidad para vincular a los universitarios con las instancias en las que pueden ofrecer su labor. “Es importante que también las instituciones reconozcan el enorme aporte que hace la UAQ”, concluyó.
