Los 29 mercados públicos que tiene contabilizados la Dirección de Fomento y Regulación Sanitaria de la Secretaría de Salud de Querétaro, tienen una evaluación de 65% en materia de sanidad, debido a que la recolección de basura es el problema más recurrente que tienen, informó el titula Alejandro Tenorio Barrientos.
“Hay una calificación de 65% de lo que nosotros revisamos. Son lugares que tienen mucho movimiento de personal y cuando nosotros llegamos —en algunas ocasiones— no está del todo limpio”, consideró el funcionario.
El director de Fomento y Regulación Sanitaria explicó que estas verificaciones se han para constatar que la gente se provee de sus víveres en espacios que son limpios e higiénicos, por ello se analizan los rubros de control de plagas, condición de instalaciones físicas, áreas de carga y descarga.
También se presta atención a los sitios de basura en general, servicios sanitarios, sistema de almacenamiento de agua potable, sistema de drenaje (coladeras y canales) e invasión o extensión de locales.
“Buscamos verlos por lo menos una vez al año. Esperamos que exista lo que llamo el poder del ciudadano, que señala las fallas del mercado al que asiste, esto nos lo hacen llegar y hacemos una verificación”, aseguró.
De acuerdo con la dependencia en la capital queretana se ubican 19 de los 29 mercados registrados. En San Juan del Río se contabilizan tres mientras que los siete restantes se ubican en Amealco, Cadereyta, Corregidora, El Marqués, Huimilpan, Jalpan y Tequisquiapan.
Explicó que en materia de recolección de basura los propios locatarios de los mercados han manifestado disgusto por el manejo que se hace de los residuos, puesto que en ocasiones son ellos mismos quienes tienen que organizarse para sacar la basura, que posteriormente será depositada en un relleno.
Otra falta en la que incurren es en los servicios sanitarios, en donde se verifica que tengan agua suficiente y que también cuenten con jabón y toallas desechables, sin embargo, este último punto no se cumple a cabalidad, destacó Tenorio Barrientos.
“Pero en general revisamos los servicios sanitarios, primero que existan, que tengan agua corriente o de la red. En lo que a veces fallan es en tener jabón o toallitas desechables para las manos. Si bien es una obligación que funcionen los baños adecuadamente, ahí a veces incumplen”.
La fumigación es otro aspecto de valoración, pues con ello evitan el surgimiento de fauna nociva —que es uno de los principales riesgos para la salud pública en los mercados—, además de que se verifica que la empresa que ofrece el servicio de desinfección tenga una licencia expedida por la Secretaría de Salud.
Tenorio Barrientos especificó que los mercados son clasificados como un riesgo medio-bajo, ya que la dirección estatal determina rangos de riesgo entre los establecimientos que evalúa. Ejemplo de ello es que las clínicas son determinadas como un riesgo alto.
“Consideramos que los mercados tienen un riesgo de medio a bajo, porque las frutas y verduras son las materias primas pero éstas van a un proceso de cocción que de alguna manera baja la probabilidad de presencia patógena”, señaló.
Sanciones
En cuando a posibles amonestaciones por incumplir con los aspectos que se revisan, Tenorio Barrientos reveló que pueden derivar en sanciones económicas e incluso la suspensión, de acuerdo con la Ley General y Estatal de Salud; aunque dichas sanciones son competencia de las autoridades jurídicas ya que la finalidad de la dirección de sanidad es trabajar con los mercados a fin de mejorar.