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Cerca de 1.5 millones de pesos podría costar la actualización del atlas de riesgos de la Unidad Municipal de Protección Civil (UMPC) capitalina, que no ha sufrido modificaciones desde 2009, dijo el titular de la dependencia, Amadeo Lugo Pérez.
Explicó que este ajuste es necesario debido al crecimiento poblacional del municipio y el estado.
Confió en que, a pesar de que los recursos provenientes de la federación no han sido confirmados, estén arribando en las próximas semanas para la actualización.
Lugo Pérez explicó que actualmente algunas colonias y partes de la zona metropolitana quedaron fuera del actual atlas de riesgos, lo que representa un riesgo para quienes deseen consultarlo.
Amadeo Lugo recordó que desde hace cerca de un año la Ley General de Protección Civil califica como un delito la venta de predios para la construcción de desarrollos habitacionales que se encuentren ubicados como “zonas de peligro” en un atlas de riesgos.
“Si existe un riesgo en la zona y está sustentado en un atlas de riesgos, el dar el aval para su construcción en automático se convierte en un delito, es de los cambios que habría en un atlas de riesgos, poder contemplar todas estas zonas”, detalló el titular de la Unidad Municipal de Protección Civil.
Participación de la sociedad
Universidades, instituciones privadas, incluso la ciudadanía, indicó, participará en este nuevo atlas de riesgos, con contribuciones como reportes que se hagan a la dependencia de lugares donde se hayan detectado zonas que impliquen posibles riesgos a la población.
El titular de Protección Civil municipal indicó que se espera que para finales de este año el mencionado documento presente un avance positivo en su realización y que a la mayor brevedad posible pueda quedar a disposición de la ciudadanía que requiera consultar sobre cualquier tipo de riesgo que pudiera amenazar alguna zona de la capital.
Como expuso Lugo Pérez, los atlas municipales son archivos que deben “alimentar” un atlas estatal, los cuales, a su vez, deben contribuir a la construcción del atlas de riesgo nacional, el cual debe contemplar cada rincón del país, así como los riesgos que azotan a cada región, principalmente ante eventos naturales como lluvias, granizadas, derrumbes, terremotos, entre otros.