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Con motivo del Día Internacional de la Mujer, representantes de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y de los Centros de Atención Familiar (CAF) realizaron un convivio con aproximadamente 200 mujeres originarias de la colonia capitalina Santa María Magdalena.
Al respecto, habitantes de la localidad expresaron su entusiasmo por participar en un festejo donde ellas eran el principal motivo de concurrencia. “Nos da mucho gusto que nos tomen en cuenta, es el primer año que estamos aquí, nos sentimos honradas de participar en este festejo”, declaró Elsa Patricia de 30 años.
Aurora Ramírez, de 55 años, refirió que para ella se ella se trataba de un día muy importante “porque se nos reconoce nuestra labor como mamás”. Coincidieron en necesitar este tipo de estímulos, por lo que dijeron que ojalá siempre sea así, “que cada año nos festejen, aunque no debe ser solamente un día, sino siempre”.
Manifestaron que además de los festejos necesitan apoyo, pues afirmaron que les faltan motivaciones, “a la mujer de Santa María le falta motivación, que le suban el autoestima, aunque hay algunos programas no nos animamos a venir, porque primero está el quehacer y nuestros hijos”.
Por su parte, el coordinador de los CAF, Gerardo González Canterbury, informó que en los 21 centros que hay en el municipio de Querétaro se brinda apoyo a 10 mil personas –mayoritariamente mujeres— quienes reciben talleres y cursos en diversas materias a fin de fomentar en la mujer una actitud de autosuficiencia.
Informó que la función principal de los centros es apoyar a las mujeres con talleres de capacitación, como de concina y belleza; también se impartes clases de zumba, computación e inglés, para darles herramientas que les permitan ganar recursos.
Los centros están enfocados a brindar atención a mujeres a fin de “elevar su calidad de vida, apoyarlas y apoyarlas para que mejoren constantemente, para que logren un desarrollo integral, que no tengan codependencia del marido, ni permitan que las golpeen”.
En los CAF “hemos tenido de todo, hemos enfrentado casos en que vienen a escondidas porque el marido no permite ese crecimiento, mientras tengan a la mujer sumisa es mejor, cuando tienen una mujer que empieza a opinar se les complican”.
Gerardo González Canterbury enfatizó que es necesario reconocer a las mujeres pues desempeñan una tarea fundamental en la formación de hijos y familia, “pero también es indispensable que crezcan ellas como personas”.
Ejemplificó que talleres como el de belleza les permite la posibilidad de cortar el cabello a su familia, a sus hijos e incluso hacerlo a la demás gente y cobrar por ello, lo que le generaría un ingreso propio.
Informó que en algunos centros se ofrece atención infantil, pues se trata de centros comunitarios donde hay niños en edad de preescolar, “tenemos un promedio de mil 200 niños; mientras los niños estudian su educación preescolar las mamás se capacitan”.
