Es necesario crear una ley que regule el trabajo de los centros de rehabilitación, conocidos como anexos, aseguró el titular de la Comisión Estatal Contra las Adicciones (CECA) de Querétaro, Guillermo Tamborrel.
Consideró que en estos espacios se presentan las peores acciones que el ser humano puede cometer, hasta el punto en que los adictos lo ven como un castigo, por lo que es urgente generar una normatividad que lo revierta.
Señaló como necesario que la nueva ley, que tendría que presentarse por un diputado o bien el gobernador, trabaje en la prevención, la revisión de los centros y las responsabilidades.
Dijo que es un tema en el que el gobierno municipal y estatal tiene que comprometerse “firmemente”.
“Se supone que la Comisión Estatal Contra las Adicciones es el órgano rector en materia de adicciones y no tenemos la facultad para inspeccionar y sancionar en su momento […], necesitamos una nueva ley, sin duda, sé que hay el interés de regular la materia de las adicciones; Querétaro necesita una ley que promocione y regule la prevención y el tratamiento de las adicciones en el estado”, indicó.
Al cuestionarle respecto a la inspección que se realiza en estos espacios, afirmó que existen algunas deficiencias, toda vez que hasta el momento se han supervisado aproximadamente 15 de los 90 anexos de la entidad.
Aunque se sabe que algunos trabajan de manera adecuada y profesional, existen otros en los que se registran las “peores bajezas”, expuso.
“En términos generales podemos decir que tenemos un sistema deficiente y que hemos podido observar las peores bajezas de lo que el ser humano es capaz, una degradación inaceptable y eso también ocurre en muchos de los anexos”, apuntó.
El ex legislador destacó que se tiene que invertir en infraestructura, ya que algunos centros están fuera de la normatividad; aunado a que debe formarse a personas capacitadas para que encabecen estos espacios.
“Hay personas que trabajan bien, pero no tienen la infraestructura conveniente y necesaria, la infraestructura con la que trabajan está fuera de norma; necesitamos invertir en nueva infraestructura; por supuesto que también debemos desarrollar al personal, hoy la norma NOM 028, establece como requisito que una persona requiere dos años para estar al frente de un anexo y eso es a todas luces insuficiente”, explicó Guillermo Tamborrel.
Sobre el trabajo en años anteriores, dijo que se registraron omisiones; inclusive se registraron amenazas por parte de los titulares de los centros, asegurando que si se hacía una clausura dejarían en las calles a los adictos.
“Las autoridades de salud habían sido omisas en la regulación, en la sanción de este tema; cuando se les ha querido regular, los llamados padrinos han querido lanzar amenazas”, refirió.
Se dijo a favor de trabajar con los diputados que presente la iniciativa para crear una ley en la materia; además, reiteró que en su labor al frente de la CECA “no nos echaremos para atrás”, ya que es necesario y urgente atender el tema de las adicciones.
El secretario de Gobierno, Juan Martín Granados Torres, en entrevista para EL UNIVERSAL Querétaro, señaló señaló que la administración buscará regular los centros de rehabilitación.
“Lo primero que encontramos como problemática es que no hay una legislación que regule adecuadamente este tipo de espacios”, concluyó Guillermo Tamborrel.