De 2011 a 2014 fueron detectados 30 casos de trata de personas con igual número de afectaciones, alertó Aleida Quintana, integrante de la organización colectivo T’ek’ei quien dijo que la mayoría de las víctimas eran originarias de otras entidades.

Explicó que, de acuerdo con los informes proporcionados por la Procuraduría General de Justicia (PGJ), 29 casos corresponden a mujeres víctimas de explotación sexual y que fueron localizadas al interior de bares, casas de masajes; otra mujer víctima de trata fue localizada en Pedro Escobedo.

Los casos de trata se han detectado sobre todo en Ezequiel Montes, Huimilpan, Pedro Escobedo y las personas afectadas presentan domicilios de otros estados, por lo que no se descarta la sustracción ilegal de las mismas, “estas mujeres eran originarias del Distrito Federal, de Michoacán, de Guanajuato y explotadas en la entidad queretana”.

Quintana dijo que según la información obtenida de la PGJ en el estado, las personas víctimas de explotación sexual detectadas en los últimos años tenían edades entre 14 a 36 años.

Aunque los informes refieren que la mayoría de las personas víctimas de explotación eran mayores de edad, no se informa el tiempo en que permanecieron en el estado en estas condiciones, por lo que Aleida Quintana consideró que pudieron ser mujeres traídas antes de cumplir 18 años. “Las personas en situación de trata por lo regular se les explota durante un promedio de 10 años por eso falta conocer la situación de estas mujeres reportadas en el estado, ver cuántas de ellas estaban reportadas como desaparecidas en otras entidades y qué tipo de atención a víctimas se les proporcionó”.

La activista agregó que en la mayoría de casos de trata, las víctimas son liberadas pero no se les brinda atención sicológica o se da seguimiento a sus casos para evitar que puedan entonces ser afectadas por amenazas.

Señaló que estas personas deben contar con una protección para no ser presas de la delincuencia, ya que son vulnerables ante los responsables de la explotación sexual que pudieran buscarlas para impedir que hagan denuncias sobre personas que las habrían privado de su libertad con fines de lucro.

“Por lo regular ha pasado en otros estados que las personas víctimas de explotación son vigiladas luego de ser liberadas, pueden acudir a interponer denuncias y afuera de los ministerios ya las esperan los responsables de explotarlas”, refirió.

Aleida Quintana consideró necesario que los gobiernos estatales tengan mayor comunicación para intercambiar datos sobre personas desaparecidas ya que bien pueden estar siendo víctimas de delitos en otros puntos del país y lo mismo puede estar ocurriendo con los queretanos que no se han localizado en recientes años.

“Hay que recordar que en el caso de trata, las personas afectadas primero son transportadas a otros puntos del país con la finalidad de alejarlas de sus familiares y amigos que representan sus redes de apoyo”, apuntó.

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