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El aumento de la tarifa al transporte público no está a negociación, sentenció Luis Bernardo Nava Guerrero, jefe de la Oficina de la Gubernatura del Estado de Querétaro, al señalar que con la intención de evitar una afectación en la economía familiar, se podrían considerar esquemas de apoyo para los ciudadanos en lugar de otorgar un subsidio a transportistas.
En rueda de prensa, en conjunto con Alejandro López Franco, director del Instituto Queretano del Transporte (IQT), Nava Guerrero explicó que gobierno del estado no tiene contemplado apoyar a las empresas concesionarias directamente, pues indicó que existe otros esquemas fiscales para que los transportista no se vean golpeados por el alza en combustible.
“No está a negociación, no está a discusión, no habrá importante en la tarifa del transporte (…) podríamos considerar algunas fórmulas de apoyo para que no haya ningún tipo de discusión, cualquier apoyo tendría que ser a los ciudadanos, no a las empresas de transporte directamente (…) no estamos hablando de apoyar a las empresas concesionarias directamente”, dijo Nava Guerrero.
López Franco recordó que el impacto económico derivado del alza del diésel, pudiera ser absorbido a través de la deducción del Impuesto Especial Sobre la Producción de Servicios (IESPS), lo que permitiría que los transportistas recuperen el recurso destinado al combustible.
Agregó que el gobernador estatal Francisco Domínguez Servién, ha girado la orden de instruir a los transportistas para hacer efectiva esta medida.
“Deteriorar la economía de miles de familias queretanas, no va a suceder, no lo vamos a permitir. Tendremos que trabajar junto con ellos (transportistas) en la optimización, en la mejora de su estructura para generar una eficiencia que les permita mantener su rentabilidad y por otro lado, mejorar el servicio para que incremente el número de usuarios.
Señaló que en estas primeras semanas del año 2017, se han sostenido alrededor de 30 reuniones con diferentes representantes del transporte público.
